El encuentro contó con la participación de 50 compañeros y compañeras de diversas organizaciones sociales, sindicatos y regionales. La modalidad adoptada fue un plenario con una introducción de situación coyuntural interna y externa para luego comenzar un debate con los presentes.
La CTA capital apuesta al debate colectivo para construir posturas políticas que permitan guiar la intervención en el escenario actual. Por ello, este encuentro se planteó como una continuidad de los dos ya realizados a fines del año 2017. El plenario fue abierto por Jose «Pepe» Peralta, secretario General, y Pablo Spataro, secretario Adjunto. Luego de la presentación, se abrió la palabra hacia los presentes, contabilizándose 21 intervenciones de los compañeros y compañeras.
En el proceso electoral, encabezado por la central porteña, el posicionamiento de la mayoría de las organizaciones y militantes que han participado de los encuentros va en concordancia con la propuesta de elección de autoridades, convocada para el 08 de agosto. Esta elección es considerada como un espacio que garantiza la discusión en el marco de la AUTONOMÍA y la DEMOCRACIA SINDICAL.
Desde la CTAA Capital propusieron al debate democrático como bandera distintiva cualitativamente, de otras organizaciones. De este modo, llamaron a la reflexión colectiva y el fomento de la participación de la militancia, para construir consensos que se plasmen, luego, en las luchas. En el plenario se consideró esto como un camino a recomponer la legitimidad de la central como un actor protagonista del debate político actual y como herramienta de transformación al servicio de la clase trabajadora.
En este sentido, el tema excluyente del debate fue el papel a desarrollar por la central dentro del panorama actual de reposicionamiento de las organizaciones sindicales y sociales, el nuevo rol que están tomando estas últimas, la falta de liderazgos globales del campo popular y el posicionamiento de la CTAA Capital en ese contexto.
Así mismo, durante el debate, se trató sobre la necesidad de una renovación generacional en la militancia, pero sin perder la experiencia de los antiguos militantes. Esto no implica sólo un cambio etario sino que apunta a una renovación en términos de ideas, de innovación y de nuevas fuerzas para continuar las luchas y encarar otras nuevas.
Surgió así también la necesidad de que el recambio generacional, debe ser acompañado por un fuerte desarrollo de la formación política, la cual tiene que ser integral, no sólo sindical, que le permita a los militantes de la CTA ser voces que pongan en discusión el modelo productivo y social argentino. Deben poder discutir la soberanía, la dependencia, el capitalismo, las alternativas y salir del discurso defensivo y reivindicativo para recuperar la CTA como herramienta para la transformación.
En el plenario se habló sobre el contexto actual del sindicalismo y se expresó que la central reivindica un nuevo tipo de sindicalismo como bandera, pero el mismo no resulta atractivo para amplios sectores de los y las trabajadores. Es por ello que numerosas organizaciones sociales surgen como espacios de contención de los sectores más vulnerables. Mientras que, dentro de la Confederación General del Trabajo (CGT), surgen corrientes que pretenden instalarse como una renovación que la saque de su rol burocrático y garante del sistema. Esto repercute en la prédica de la CTA e implica un desafío para la construcción cotidiana, más aún cuando movimientos sociales crecientes apuestan por la CGT y no por la CTA. Los compañeros y compañeras presentes, vieron entonces, la necesidad de recuperar la identidad CTA por encima de las identificaciones sindicales, partidarias o de otro tipo.
Para finalizar, quedó expresada la necesidad de fortalecer estos espacios de debate, incorporando a los diversos sectores del campo popular, mas allá de la coyuntura electoral, con el propósito de reforzar y ampliar la organización como herramienta transformadora de la clase trabajadora.