El viernes 14 de diciembre se llevó adelante un nuevo Encuentro de la Militancia de la Ciudad de Buenos Aires, en la sede de la Central porteña, en el barrio de San Telmo. Se trató de una charla debate en la que participaron varias organizaciones hermanas para reflexionar sobre el pasado, presente y futuro de los movimientos sociales y sindicales en nuestro país.
Las compañeras y compañeros de la CTAA Capital junto con organizaciones como el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el Frente Popular “Darío Santillán” (FPDS) y el Movimiento Evita de la CTEP; se dieron cita el viernes por la tarde en la casa de los trabajadores y trabajadoras de la Ciudad.
El 5° Encuentro de la Militancia fue abierto por Pablo Spataro, secretario General de la Central, quien agradeció la participación de todos y todas los presentes para poder hacer una reflexión conjunta sobre la historia de la CTA y el movimiento social con el objetivo de trazar nuevos desafíos y formas de lucha. “Si el movimiento popular pudo parir un nuevo tiempo en la Argentina a partir del 2001 y un nuevo Estado que cambió también a partir del nuevo tiempo político que se abrió. Si el movimiento popular hoy ha podido conseguir una ley tan importante como la de Emergencia Social, que fue ganada en las en las calles para conquistar lo que significan mejores condiciones de vida para nuestros compañeros y compañeras; la pregunta que nos hacemos es ¿Cómo desde nuestras organizaciones manejamos la tensión entre generar nuevas políticas públicas para que el Estado se parezca cada vez más a lo que nosotros necesitamos como organizaciones sin quedar entrampados con los gobiernos? ¿Cómo hacemos para construir respuestas cotidianas en nuestros espacios comunitarios, en nuestros bachilleratos populares, en nuestras cooperativas de trabajo , en el espacio de mujeres , en los espacios deportivos y culturales, discutir el Estado? Porque si pudimos y podemos generar todas estas herramientas ¿Por qué no podemos pensar que algún día los trabajadores y las trabajadoras podamos gobernar este país?”
Charly Fernández, del FOL, expresó: “Nosotros creemos que hay un doble movimiento que tenemos que encarar los movimientos sociales. Por un lado, la necesidad de ir construyendo frentes cada vez más amplios y la unidad de acción para la resistencia y conseguir nuestros derechos. Por el otro, la necesidad de poder pensar proyectos propios, proyectos emancipadores, proyectos que salgan de ese clivaje entre inclusión y exclusión , sino lo que muchos decimos proyectos de construcción de poder popular alternativo. Esto es para nosotros el desafío del momento”.
“Para nosotros no es casual, los dos movimientos más importantes y dinámicos, han sido el movimiento de mujeres con todas sus luchas y los movimientos sociales. Estos son un acumulado de experiencias, de muchos años de empoderamiento y de conciencia en nuestras propias construcciones, en la construcción de una alternativa de poder popular. Para nosotros eso es central y creo que si bien hemos tenido distintos momentos, esa labor la hemos sostenido desde el principio y muchos de nosotros y nosotras la hemos resignificado”, finalizó el compañero Charly.
Luego intervino Carina López Monja, del FPD, quien dijo: “Dentro del Frente ‘Darío Santillán’ nos reinvindicamos como el sector más fuerte que tienen los trabajadores y trabajadores de la economía popular en cuanto a organización. Entendemos que en el proceso de 10 o 15 años, donde peleábamos por trabajo (donde la cultura de trabajo no estuvo presente por dos generaciones) para poder construirnos bajo la autogestión con otras relaciones de trabajo y económicas, este sector de la economía popular llegó para quedarse. No hay posibilidades, con este capitalismo o sistema, que haya trabajo formal para todos y todas. En este sentido entendemos que tenemos una tarea central ya que el sector precarizado de los y las trabajadoras es cada vez más grande. Por ello es importante generar unidad entre los trabajadores y trabajadores en relación de independencia. Los desafíos que hoy tenemos son distintos, estamos frente a un gobierno que nos precariza, nos ajusta y que viene por todos y todas”
A su turno, Marta Yané del Movimiento Evita de la CTEP , dijo: “La unidad empezó a construirse en la calle y expresa el sentir y pensar de todos los compañeros y compañeras. Vamos construyendo la síntesis en la lucha, día a día. Pero aún asi, se debe poner en el centro del debate político las necesidades de nuestros compañeros, porque nuestros errores lo pagan las y los compañeros en los barrios y sus sectores de trabajo. Hay que poner en el centro las necesidades de las organizaciones y no las de los referentes. Sin embargo eso sólo no alcanza. Además de construir al unidad en la calle y en lo electoral, los movimientos populares tenemos que tener la capacidad de que ese piso de compañeros movilizados que tenemos, lo podamos elevar, y no ir a la movilización sólo por la necesidad. También es necesaria la participación, el compromiso y la formación. Es necesario que cada uno se vaya convirtiendo en ese militante social que sale a pelear por los derechos concretos de su barrio, de sus vecinos. Es lo que nosotros llamamos ‘El Pueblo Organizado’”
Por su parte, Virginia Manzano, Investigadora del CONICET y docente de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA , recorrió históricamente el surgimiento de los movimientos sociales y sindicales en nuestro país, y relacionando el accionar de estos últimos con los diferentes gobiernos. Para cerrar su intervención, expresó: “En la Ciudad de Buenos Aires, el gobierno puso un nuevo modelo represivo hacia los movimientos sociales que se expandió a nivel nacional con la ocupación del Parque Indoamericano de Villa Soldati en 2010. Porque lo que traen los movimientos con su lucha, con las movilizaciones en la calle, traen otras nociones de política mas amplia que solo la época electoral, que se relaciona con tratar de recuperar a los sujetos, de crear trabajos colectivos y que puede ejercerse en múltiples espacios con distintos métodos. El problema surge con la implementación de los planes represivos, que buscan limitar la expresión mínima de política. Pues ella solo tiene lugar en el momento del voto, todo lo que suceda luego o antes puede quedar como ilegal. La criminalización hacia los movimientos sociales y sindicales, comenzó hace tiempo. Por ello, en este contexto, es necesario una política de cuidado de las luchas y del poder”
Este 5° Encuentro de la Militancia, al igual que los anteriores, se viene realizando por la necesidad de los compañeros y compañeras de la Central de poder contar con un espacio de intercambio, de reflexión y de debate para construir colectivamente las líneas de acción en un contexto conflictivo como el actual para todas y todos los trabajadores. En este sentido Daniela Rodríguez, secretaria de Formación de la CTAA Capital , reflexionó: “En principio, como siempre me gusta remarcar que este tipo de encuentros promovidos y pensados desde la mesa de conducción de la Central, son instancias vitales para pensar críticamente sobre nuestra acción y que ese pensar colectivo entre la militancia que codo a codo construimos la central y la resistencia a este modelo de hambre, precarización y ajuste, hace a nuestra formación y no debe ser pensado como un alto en la lucha sino como un momento en ella. Luchamos, debatimos y nos formamos al calor de nuestra acción cotidiana para construir el modelo de sociedad que necesitamos como clase trabajadora. Y en esta oportunidad lo hacemos con la alegría de poder compartir con organizaciones hermanas con las que nos sentimos unidos, más allá de las banderas, en principios y prácticas que guían nuestra acción”
“Por otra parte, también me gustaría remarcar que nos hace felices que el panel debate que armamos en esta oportunidad haya sido protagonizado por mujeres, por mujeres luchadoras, militantes e intelectuales, que reflejan los grandes pasos que hemos dado en el empoderamiento de las mujeres. Eramos nosotras las que empezamos la etapa movilizando, armando los comedores, organizando los planes pero a la hora de decidir, a la hora de dirigir siempre eran los varones lo que quedaban al mando. Hoy estamos avanzando en ese sentido, y no por caridad, no por moda, sino porque lo hemos construido y somos valiosas para el desarrollo del movimiento popular”, agregó la compañera.
Para finalizar, Daniela dijo: “En este encuentro, quisimos como siempre, dejar planteadas más preguntas que respuestas. Preguntas que nos acompañen en el día a día, porque aspiramos a mucho más que a resistir, a mucho más que sobrevivir en el marco de este modelo de miseria y muerte. Aspiramos a que nuestra clase gobierne libre y democráticamente, con la autonomía de clase como bandera.