Este sábado 21 de marzo se llevó a cabo una vez más, como todos los años, una jornada barrial de resistencia y memoria en la plaza ubicada en la intersección de la avenida San Martín y Apolinario Figueroa, porteño barrio de Villa Crespo. Hubo una radio abierta por la que pasaron bandas musicales, actores, familiares de Luciano Arruga y miembros de APREMIA, y una muestra de fotos sobre los 70 y los 10 años de estos encuentros. El grupo de percusión de IMPA cerró la jornada con sus templados timbales.
Para tener más detalles sobre esta actividad, hablamos con Carlos Méndez, Comunero de la 15 e integrante de la CTA Regional Centro, quien nos dijo que “una vez más estamos haciendo un encuentro de vecinos como en los últimos 10 años, con organizaciones sociales y políticas para recordar el día nefasto del 24 de marzo, para decir que reivindicamos los Derechos Humanos de ayer, de hoy y de siempre. Que no olvidamos, que no perdonamos y que estamos a favor del esclarecimiento de todos los casos que hubo y que hay de violaciones a los Derechos Humanos. Lo hacemos para reflexionar e intercambiar opiniones sobre lo que va pasando en casos como el de Julio López, y Luciano Arruga, que ya no son algo cotidiano. Para nosotros es un honor y un orgullo que estén participando tantos vecinos junto a nosotros”.
Martín Iommi, Comunero de la 6 y participante de la misma regional, agregó que “estamos aquí para recordar a los Desaparecidos, y especialmente, hacer una actividad cultural con todas las organizaciones del barrio que luchan no sólo por los 30 mil sino también por los Derechos Humanos de hoy, y para que se esclarezcan los casos graves que hay. Entre las actividades hubo una orquesta de tango y otras actividades culturales y recreativas”.
Enrique Mario Fukman, miembro de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, sobreviviente del campo de concentración y extermino que funcionó en la ESMA, brindó su adhesión al encuentro y nos dejó algunas más que importantes precisiones: “esta actividad para nosotros es muy importante porque es como acercar a cada casa el tema de la construcción de la memoria y la problemática de los Derechos Humanos para que escuchen y conozcan más. Es fundamental llevar el debate y estas problemáticas adonde está el pueblo, que es en los barrios”. En cuanto a la concientización, que a veces es difícil de lograr, puntualizó que “tenemos que entender que el problema de los Derechos Humanos del pasado tiene que ver con el presente, y que no tenemos que reaccionar cuando tenemos el problema sino saber que tenemos el derecho de reclamar por nuestros derechos, y que el gobierno de turno no tiene que reprimir – como hace con pueblos originarios como los Qom, las madres de Ituzaingó, Córdoba, o los trabajadores- sino darnos una respuesta. Estos son problemas de todos”.
Antes del cierre musical, habló Laura Ginsberg, de APEMIA, vecina del barrio, quien se dirigió a quienes estábamos en esta querida plaza: “este año, a 39 años del Golpe Militar, la impunidad de ayer, 21 años de la Masacre impune de la AMIA, la impunidad de hoy, y en esta oportunidad, casi de manera inesperada, ver el hilo conductor de los servicios y de las fuerzas de seguridad e inteligencia que torturaron, desaparecieron y reprimieron ayer y continúan trabajando hoy al servicio de la criminalidad del Estado. Por eso vamos a marchar el 24 de marzo, para denunciar la impunidad de ayer y de hoy”.
Entre los convocantes a este encuentro ya tradicional se encontraron la Asamblea del Cid, la CTA Nacional y la Regional Centro, la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, APEMIA, el Movimiento Emancipador, el Grupo Taricco, Unidad Popular Comunas 15 y 6, y el Ateneo Santiago Pampillón J. Radical comuna 15, entre otros.