Daniel Palladino, Secretario General de la Asociación de Empleados de Correos Privados de la República Argentina (AECPRA-CTA), se refirió a los alcances de la lucha de su organización. Además dialogó con ACTA sobre la importancia de seguir fortaleciendo a la CTA en el ámbito privado: “Los compañeros, lo primero que preguntan es sobre la legalidad, cómo organizarse. Necesitan ayuda, espacio físico dónde reunirse, y fundamentalmente, concientización de los derechos que tienen, dijo Palladino.
-¿Cuál es la situación que atraviesa la Asociación de Empleados de Correos Privados de la República Argentina?
En este momento tenemos simplemente inscripción, o personería jurídica, que es la inscripción número 2969. Después de 7 años y medios de lucha en el Ministerio de Trabajo de la Nación, logramos la inscripción el 25 de julio del año pasado.
-¿Cómo avanzan las negociaciones salariales del sector?
Nosotros venimos negociando paritarias con la empresa desde 2010 hasta la actualidad. Todos los años, a pesar de no tener el reconocimiento del Ministerio, negociamos recomposición salarial, condiciones de trabajo, jornada laboral –que hoy por hoy es de 8 horas y 15 minutos, más 45 minutos de almuerzo, de lunes a viernes-. Cuando anteriormente era de 12 horas, sin sábado, ni domingo, nada. Hasta ahora, todas las discusiones paritarias fueron acumulativas. Si bien fueron en dos o tres partes, siempre fueron acumulativas. Y nunca menores al convenio de camioneros, que es el que tiene la base –nosotros somos jerárquicos, y conducimos a compañeros que están dentro del gremio de camioneros-. Si ellos sacaban un 24% a marzo, nosotros también sacábamos un 24% acumulativo con la base del mes anterior. Logramos bonos de Fin de Año, permisos gremiales –hoy por hoy tenemos 25 compañeros con permisos gremiales en toda la asociación –totalmente pagos por la empresa y liberados para tareas gremiales.
-¿En qué medida la discusión paritaria de ese sector se ve afectada por el alcance del impuesto al salario?
Esa es una problemática muy grande que tenemos, porque al recomponer salario cada vez que negociamos salarios, cada vez entran más compañeros en la quita por impuesto a las ganancias. Entonces, nos condiciona la lucha en las paritarias porque, por ejemplo, ahora existe un solapamiento entre jerárquicos: tenemos un mismo jerárquico que por ahí es jefe, y el encargado que tiene un sueldo menor, como no paga impuesto, cobra más que el jefe. En ese sentido, estamos trabajando junto a otros gremios de jerárquicos, en el marco de la CTA, para presentar un informe y tener algún tipo de acción en relación a esta problemática.
-¿Cómo puede hacer la CTA para continuar fortaleciéndose en el sector privado?
En principio es fundamental reforzar la asesoría gremial. Tenemos muy bueno abogados, pero a veces no dan abasto de la cantidad de tarea que tienen. Los compañeros, lo primero que preguntan es sobre la legalidad, cómo organizarse. Necesitan ayuda, espacio físico dónde reunirse, necesitan concientización de los derechos que tienen. Nosotros utilizamos mucho el Manual del Delegado, se lo pasamos a todos nuestros compañeros que están en la organización, lo mismo que el Manual de Negociación Colectiva. Esos materiales son fundamentales, hay que difundirlos más masivamente.