Los aeropuertos fueron la principal vía de ingreso del Covid-19 al país, pero también de los insumos para hacer frente a la pandemia, gracias a la labor esencial de los trabajadores aeronáuticos. Además, su rol fue clave en la repatriación de argentinos y argentinas varados en el exterior. Sin embargo, poco se supo de los reclamos ante la falta de elementos de protección personal para quienes trabajan en empresas tercerizadas; o ante el cierre de empresas como LATAM; o ante la fusión de empresas como Aerolíneas-Austral.
En esta entrevista, Marcelo Goyeneche,
trabajador aeronáutico de CTAA, explica cuáles fueron las
consecuencias de estos descuidos por parte de las patronales, cuáles
son las principales reivindicaciones ante las políticas de ajuste y
cómo llevan adelante la resistencia pese a las acciones
antisindicales de las empresas aerocomerciales en el marco de la
pandemia.
Los aeropuertos fueron el epicentro
inicial de la pandemia, ¿Cómo atravesaron esa situación las y los
trabajadores?
El Covid-19 agravó las desigualdades
que hay entre los trabajadores en el ámbito aeroportuario. Podemos
decir que Aerolíneas Argentinas tomó rápidamente medidas de
prevención y protocolos de salubridad mientras que en las empresas
tercerizadas del ámbito aeroportuario la realidad fue otra. Al
comienzo de la pandemia en el Aeropuerto de Ezeiza la empresa de
seguridad GPS, tercerizada de Aerolíneas Argentinas, despidió a
trabajadores que estaban en la primera línea de exposición a la
pandemia, por pedir elementos básicos de protección como guantes,
barbijos y alcohol en gel para poder llevar adelante las tareas en
los vuelos humanitarios de repatriación.
Gracias a la lucha de sus compañeros
se logró la reinstalación. Por otra parte, LATAM anunció que
dejaba de volar en el país. La decisión abrió un enorme conflicto
laboral, puesto que puso en jaque la fuente de trabajo de más de
1700 compañeros y compañeras. Varios de ellos han aceptado el
retiro voluntario y otros siguen peleando por las fuentes de trabajo.
La empresa atribuye la salida del país a “las actuales condiciones
de la industria local, agravadas por la pandemia”, esto se suma al
cierre de vuelos domésticos por parte de Avianca y a la crisis de la
empresa Andes.
Los compañeros y compañeras de la
empresa de catering Gate-Gourmet también atraviesan una situación
muy delicada. Al comienzo de la pandemia fueron despedidos 190
trabajadores pese al DNU 329 que prohíbe los despidos. La mayoría
de su personal está suspendido y con gran incertidumbre sobre su
futuro laboral. Y por último, en medio de todas estas noticias,
Aerolíneas Argentinas comunica que la empresa Austral, parte del
grupo y con 70 años de trayectoria en la aeronáutica nacional,
dejará de existir y su personal pasará a formar parte de dos
unidades de negocio, algo que lógicamente generó una inmediata
incertidumbre entre los trabajadores tanto por su futuro laboral como
por los Convenios Colectivos de Trabajo (CCT).
Ante la alerta y movilización de los
trabajadores, la respuesta de la empresa no se hizo esperar con
despidos sin causa y suspensiones a trabajadores y delegados en una
clara maniobra de persecución sindical. Luego vino la suspensión de
gran parte del personal, por lo tanto se vio afectado el salario y
las condiciones de vida de nuestras familias.
¿Estos descuidos de parte de las
empresas tercerizadas que precarizan a sus trabajadores ha implicado
la diseminación del virus también entre los sectores populares de
la CABA, donde estalló primero la pandemia, verdad?
Sin dudas que así fue. En los primeros
días del mes de mayo un trabajador de GPS, empresa tercerizada de
Aerolíneas, contrajo el virus. El trabajador que dio positivo vive
en la Villa 31 junto a su familia, que también dio positivo en los
tests que se les practicaron. La empresa inmediatamente salió a
decir que no se había contagiado en el Aeropuerto, lo cual suena a
una burda excusa, cuando desde el comienzo de la pandemia los
delegados de GPS venían exigiendo la realización de tests masivos
entre los trabajadores y que se garantizaran las medidas sanitarias
básicas, como la desinfección de los lugares comunes, una mayor
cantidad de insumos de protección y la instalación de una base
operativa nueva donde se evite el hacinamiento de las y los
trabajadores.
¿Cómo eran las condiciones
laborales antes de la pandemia y cómo son actualmente?
Las condiciones laborales en el
aeropuerto son muy disímiles desde hace mucho tiempo. Las políticas
neoliberales implementadas desde los `90 en el país, que buscaban
flexibilizar los derechos laborales para generar más empleo,
terminaron precarizando las condiciones de trabajo y aumentando la
desocupación; la tercerización y los contratos fueron la forma en
que las grandes empresas, como Aerolíneas Argentinas y Aeropuertos
Argentina 2000 entre tantas, se deslindaron de sus responsabilidades
y debilitaron la estabilidad laboral al tercerizar el trabajo en los
aeropuertos.
¿Cómo se comportó la patronal
ante la llegada del Covid-19? ¿Informaba? ¿Cuidaba al personal? ,
¿Las empresas cumplen con los protocolos para que los trabajadores
trabajen en condiciones seguras?
Aerolíneas Argentinas rápidamente
tomó las medidas necesarias para el cuidado y protección de sus
trabajadores y pasajeros, algo que se hizo de conjunto con los
gremios aeronáuticos. Pero no fue así con las empresas
tercerizadas, por lo tanto, en este juego de responsabilidades un
tanto perverso, donde la mayor empresa de la aeronáutica nacional
cuida a sus trabajadores directos, pero deja a las empresas que ella
misma contrata a tomar medidas tardíamente o directamente a no
cumplir con los protocolos de salubridad,forma parte de este
engranaje malicioso de la tercerización y en definitiva el desprecio
por los trabajadores. Como si los hubiera de primera y de segunda
clase. Yo tengo los elementos de salubridad, pero el que trabaja a mi
lado, ya sea personal de seguridad o maestranza no los tiene, por lo
tanto estamos todos en riesgo.
¿Que otro rol tuvieron y tienen los
trabajadores aeronáuticos durante la pandemia pese al cierre de los
cielos?, ¿Qué tipo de tareas se están desarrollando en esta fase
del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO)? Cómo afecta
el teletrabajo?
Un rol trascendental sin dudas. Y donde
pudimos ver a las claras la importancia de contar con una Línea
Aérea de Bandera como Aerolíneas Argentinas. Comenzando con los
vuelos de repatriación y los vuelos a China en busca de
respiradores. A eso le debemos sumar los vuelos domésticos
transportando a las distintas provincias a pasajeros varados en
varios puntos del país. Todo esto se pudo llevar a cabo por el
trabajo incansable de las y los trabajadores aeronáuticos y
aeroportuarios en conjunto.
¿Por qué consideran esencial la
labor de los trabajadores en la industria aérea? ¿Cuál es el rol
de la industria aérea para el país?
La industria aerocomercial genera de
manera directa más de 70 mil puestos de trabajo y miles más de
manera indirecta a través del turismo fundamentalmente. Es, además,
un verdadero catalizador de desarrollo económico y social sin contar
el rol esencial en la conectividad estratégica de zonas donde es
difícil llegar sin el avión. Esto último gracias al rol que cumple
la Línea Aérea de Bandera, donde está en juego de manera
estratégica la conectividad por sobre la rentabilidad de ciertos
lugares a los que de ninguna manera una línea aérea privada
llegaría, en un país como el nuestro con un territorio tan basto,
esto es indispensable.
-¿Qué perspectivas ven para su
actividad en los próximos meses de 2020?
El panorama es muy complejo e incierto.
Aerolíneas anunció la vuelta de algunos vuelos internacionales y
regionales a partir del mes de octubre, pero sabemos que llevará
mucho tiempo volver a tener las mismas frecuencias que antes de la
pandemia. No queda claro aún qué rol jugarán las empresas low
cost, ni qué sucederá con las rutas que no volará LATAM. A su vez,
el Ministerio de Transporte no puede desconocer que LATAM está
cerrando la filial Argentina para volar hacia el país con personal y
condiciones laborales de otros países.
También sabemos
que se han reunido desde la empresa con algunos sindicatos para
negociar algunos puntos del CCT, lo cual es a la claras un intento de
flexibilización de los convenios.
Y en cuanto a lo salarial, ¿Cuál
era la situación anterior y cuál es la actual? ¿Padecieron
reducciones salariales?, ¿Hay paritarias?
No hemos tenido paritarias y no se
escuchan voces que las estén reclamando. Al contrario, los rumores
pasan por la negociación de condiciones laborales establecidas, más
que por un aumento de salario.Tenemos que terminar con la lógica de
que las crisis siempre las pagan los trabajadores.
¿Cómo se está resolviendo la
crisis en la industria aérea comercial? Es decir, ¿Qué política
están llevando adelante las empresas? Y el Estado, ¿Cómo
interviene?
Para los trabajadores y trabajadoras
con mucha preocupación e incertidumbre. No sabemos qué sucederá
con los compañeros de Austral y su CCT, ni con la continuidad de las
fuentes de trabajo de los trabajadores de LATAM y de varias empresas
del sector aerocomercial. De lo que si podemos dar fe es de la enorme
solidaridad demostrada por las compañeras y compañeros aeronáuticos
en su conjunto, que se han movilizado varias veces en largas
caravanas de autos a los aeropuertos reclamando tanto por la lucha en
LATAM, Austral y en las distintas empresas del sector aerocomercial.
¿Se han registrado acciones
anti-sindicales por parte de las patronales?
Sí, se vienen realizando con el
intento de desafuero de los delegados de Austral en Aeroparque y lo
más preocupante es que cuentan con el aval de la conducción de APTA
(Sindicato de Técnicos Aeronáuticos), encabezado por Ricardo
Cirieli, quien no condenó las medidas persecutorias y
anti-sindicales, sino que salió con un comunicado público de tipo
discriminatorio y macartista a defenderlas.
¿Qué proponen como aeronáuticos
en CTAA? ¿Han pensado propuestas para mejorar sus condiciones en el
marco del ASPO?
Como sostenemos desde la CTAA en la
campaña: “Esenciales somos lxs trabajadorxs. Producimos la
riqueza, discutamos su distribución”, la crisis en la
post-pandemia continuará, no tiene por qué ser cargada las
consecuencias en las espaldas de los trabajadores. Seguiremos en la
campaña de solidaridad con los trabajadores y delegados de Austral
que enfrentan la persecución y el intento de juicio de desafuero por
parte de la empresa. Desde el bloque gremial de la CTAA varios
sindicatos se han solidarizado y creemos fundamental este apoyo
masivo para enfrentar cualquier tipo de atropello contra la
organización de los trabajadores.
Seguiremos promoviendo la más amplia
unidad del sector aeronáutico para contrarrestar cualquier intento
de ajuste y avance sobre las condiciones de trabajo, la democracia y
libertad sindical. Vemos con suma inquietud cómo se promueve la
flexibilidad laboral como estrategia de competitividad y esto
inexorablemente avanza sobre los derechos de los trabajadores, se
está utilizando el contexto de pandemia como escudo y eso nos
preocupa y mucho.