Las y los trabajadores decidimos dónde y cómo nos organizamos

Ante los anuncios del Gobierno Nacional sobre la finalización de la IFE y el ATP, desde el Bloque Organizativo Gremial de la CTAA Capital consideramos imprescindible recuperar la capacidad de organización desde la Central. Con ese objetivo fue elaborado el posicionamiento que se publica a continuación.

* Por Bloque Organizativo Gremial de CTAA Capital

Desde hace algunos años, el conjunto de organizaciones, compañeros y compañeras que conformamos la CTAA Capital, resolvimos afrontar las dificultades coyunturales a partir de la realización de encuentros de militantes, donde debatimos fraternalmente no sólo la coyuntura sino también las líneas políticas estratégicas de construcción y organización de nuestra Central.

Esta actitud, valiente y coherente con nuestra historia y trayectoria de lucha por un sindicalismo de nuevo tipo, nos permitió reafirmar con claridad nuestros principios fundantes – autonomía de los partidos, los patrones y los gobiernos; libertad y democracia sindical y solidaridad con la clase para luchar en unidad- y nuestra pertenencia a esta CTAA como eje fundamental de construcción.

Históricamente la CTA Autónoma levantó las banderas de libertad y democracia sindical como principios fundamentales para ejercer el derecho a la organización sindical, ya sea disputando al interior de sindicatos existentes, construyendo nuevas organizaciones para dar respuesta a la gigantesca masa de trabajadoras y trabajadores indefensos ante las prácticas de la burocracia sindical o propiciando la afiliación directa a la Central, como herramienta política para garantizar derechos donde no haya organización y marcar así la diferencia con el sindicalismo verticalista tradicional.

Creemos que uno de los grandes aciertos de nuestra CTAA es la afiliación directa, siendo ésta una novedad en las metodologías sindicales del mundo ya que la afiliación directa permite que se afilien a nuestra Central todas y todos los trabajadores que se sientan identificados con nuestra acción sindical, sin importar si a) su gremio está afiliado a otra organización sindical; b) no existe gremio en su lugar de trabajo; c) se encuentra sin registrar su relación laboral.

Es por esto que la afiliación directa es tan resistida por todo el sistema, desde los patrones, pasando por los gobiernos y autoridades estatales, hasta los mismos sindicalistas-empresarios.
Ahora bien, la afiliación directa como herramienta no se contrapone con la organización de la clase en cada rama de actividad, que es lo definido como fundamental para el crecimiento de la Central.
Ninguna agrupación o sector puede apropiarse de esta herramienta ya que es patrimonio de toda la CTA.

Hoy vemos con preocupación algunas formas en que se pretende aplicar la supuesta organización de la afiliación directa en un sector tan complejo de organizar como es el de los trabajadores y trabajadoras del Sector Privado.

Creemos que para implantar cualquier forma de organización del sector privado, deben impulsarse todos los debates necesarios, respetando las estrategias de construcción acordadas y la opinión de las organizaciones que desde hace años construyen CTA, con todas las dificultades que esto conlleva. Nos preocupa enormemente que en nombre de la libertad y democracia sindical se alienten estrategias que contradicen estos principios.

En primer lugar no puede confundirse a la afiliación directa con la destrucción del sindicato como herramienta de organización, con la consiguiente atomización de la clase trabajadora. Estamos convencidos y convencidas que los diferentes procesos organizativos siempre deben apuntar como norte hacia la sindicalización de las y los trabajadores en sus lugares de trabajo.
En segundo término advertimos un despropósito en que, en nombre de la libertad y democracia sindical, se pretenda que una persona se arrogue la representación de un sector o un colectivo sin que nadie, absolutamente nadie, lo haya votado para ello, nombrando de igual forma delegaciones o juntas de delegados provinciales.

En tercer lugar, ratificamos que hasta tanto y en cuanto los trabajadores afiliados directos de nuestra Central decidan cómo y dónde organizarse, son sus representantes y voceros las conducciones votadas por ellos en las elecciones de CTA, que no por casualidad se establecen con el voto secreto y directo para todos los cargos.

Por último, debemos recordar que desde la década del noventa, la precarización viene carcomiendo el mercado laboral argentino. Al crecimiento de la desocupación debe sumársele también el de la subocupación, la informalidad y la destrucción de puestos laborales en relación de dependencia. La disputa por la distribución de la riqueza ha agudizado en los últimos años los ataques del capital contra la clase trabajadora y es por esto que se vuelve fundamental el fortalecimiento de las organizaciones que las y los trabajadores han sabido construir para conquistar derechos defenderlos.

Hoy, los sindicatos son la principal herramienta de organización colectiva para resistir el avance de la flexibilización laboral y hacer cumplir las leyes en los lugares de trabajo y es por ello que deben priorizarse todas las estrategias que sirvan para su desarrollo.

Ante las nuevas profesiones y modalidades de contratación que buscan la fragmentación del mercado laboral, sostenemos nuestro compromiso en impulsar la organización gremial de los trabajadores -destinando los recursos que sean necesarios para ello- y rechazamos las prácticas de afiliación directa allí donde existan expresiones referenciadas a nuestra Central o que pongan en juego a la sindicalización como herramienta para mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo.

La mejor manera de encarar las diferencias es dando el debate de manera democrática; con los protagonistas y con las discusiones políticas que sea necesario plantear sobre la mesa para salir fortalecidos a dar la disputa en un contexto por demás adverso para la clase trabajadora.

“Nuestro orgullo es transfeminista, popular, sudaca y villero”

La CTAA Capital participará esta sábado 14 de noviembre a las 16 horas en la Villa 31, barrio porteño de Retiro, de la Segunda Marcha del Orgullo LGBTTIQ+ Trans Villera Plurinacional, por la Ley Integral Trans.

Con la particularidad de los cuidados de este año de pandemia, los, les y las compañeras se movilizarán de manera presencial el sábado 14 de noviembre a las 16 horas con distanciamiento social y barbijo. El punto de concentración será la Sede de la Diversidad Trans Villera Manzana 12 Casa 32, Sector Güemes Villa 31 / Barrio Padre Carlos Mugica.

Janet Mendieta, de la organización Somos Fuego de la CTAA Capital, contó cómo comenzó esta iniciativa y expresó: “Esta es la segunda marcha del Orgullo Trans, Villera y Plurinacional en la que vamos a participar. Junto a la Asamblea Feminista venimos organizándola hace más de un mes, porque para nosotras es muy importante que se realice esta marcha. Surgió hace dos años, cuando se hizo el primer Paro Nacional de Mujeres, y una de las principales demandas que tenemos es que se haga Justicia por los femicidios de nuestras compañeras y vecinas de la 31, Liliana, Florencia y Daiana. Además, como mujeres, como madres y como trabajadoras, nuestra otra lucha es que se nos reconozca por el trabajo esencial que hacemos”.

“Esta experiencia es muy potente porque nos permite celebrar el orgullo en perspectiva interseccional. Somos una organización de trabajadoras y trabajadores y asumimos el desafío de plantear nuestras experiencias de lucha poniéndole el nombre a las desigualdades también en perspectiva de Género y Diversidad. Estamos felices en el marco de ampliación de derechos y vamos por más y por que sea de verdad un tiempo nuevo para todes”, sentenció Clarisa Gambera, secretaria de Géneros de la CTAA Capital

Por su parte, Cali Encarnación, también de Somos Fuego, agregó: “Está bueno hacerla, porque no es solo una marcha, es una marcha de valentía para demostrar que tenemos los mismos derechos e igualdad y esto puede cambiar la mentalidad de la gente de la villa”.

A su turno, Camila Ramos, de la misma organización, opinó: “A mi me parece importante la marcha del orgullo porque ahí se ve toda la lucha que tienen todes les compañeres. Se ve las problemáticas que tiene cada espacio. Me parece muy importante que se vea acá en el barrio de la Villa 31, que acá apoyan y hay compañeras de todo tipo y de toda clase. Me parece necesaria y me encanta participar.”

Daniela Rodriguez, secretaria de Formación de la CTAA Capital comentó: “Nosotras desde la CTAA Capital queremos contribuir a la construccion de un feminismo popular, sororo y de las diversidades. Las mujeres cis hemos logrado avanzar para ser escuchadas y visibilizar nuestras luchas, es hora de empujar para incluir a todes en la historia, es con todas, es con todes, es juntes. Es necesario visibilizar las desigualdades que viven históricamente las diversidades/disidencias sexuales y la doble opresión que se suma por sus identidades villeras. Buscamos el reconocimiento , el respeto de sus derechos y el trato digno y por eso este sábado nos sumamos, porque el orgullo sigue siendo lucha. «

Para quienes quieran participar de la movilización de manera virtual, pueden hacerlo enviando sus fotos y o videos -de máximo 30 segundos de duración- a las redes sociales de la Asamblea Feminista Villa 31/31 Bis.

Fotos: Betiana Aguirre

Tomás Devoto: “Hay disposición para luchar”

Las y los trabajadores telefónicos han sido declarados como esenciales en el marco de la pandemia, ya que de su trabajo depende la intercomunicación de toda la sociedad argentina. Aún así, al mes de noviembre de 2020 continúan trabajando con sueldos por debajo de la línea de pobreza, sin discutir paritarias y con sus salarios congelados por decisión de las empresas que a caballo del aislamiento social, multiplicaron sus ganancias vía aumento de tarifas e incremento de la conectividad.

Tomás Devoto integra la Comisión Administrativa de FOETRA Buenos Aires por la lista Granate-Blanca por parte de la agrupación Telefónicos de Pie-CTAA, la lista opositora a la conducción del sindicato que agrupa a las y los trabajadores de las telecomunicaciones: un servicio declarado esencial en el marco de la pandemia, ya que según cuenta el propio Devoto: “mantenemos el servicio activo, conectando y comunicando a la sociedad en el marco de una pandemia, cuando es más necesario que nunca”.

“Para eso somos esenciales -asegura Devoto- pero para el salario no: nuestra paritaria venció el 31 de junio de 2020 y a partir del 1 de julio empezó la nueva, pero desde esa fecha está sin resolverse; por lo que prácticamente pasamos cinco meses sin una recomposición salarial. Situación a la que se suma que las empresas Telecom y Clarín -con una clara posición dominante en el mercado- tomaron la decisión de congelar las paritarias en el momento que la actividad se declaró por decreto Servicio Público Esencial; decisión que acompañaron desde Telefónica y Claro y nos llevó a esta situación. Eso si: nos pagaron un adelanto a cuenta de paritarias de 6500 pesos por única vez que nos descontaran luego”.

Consultado sobre el contexto que atraviesan los trabajadores que representa, el dirigente de Telefónicos de Pie no dudó en responder que hay empresas super ricas, monopólicas, multinacionales, con trabajadores esenciales pobres que, en su gran mayoría, tienen ingresos de entre 34 y 45 mil pesos mensuales, muy por debajo de la línea de pobreza.

“En este momento además -continuó Devoto- nos encontramos con la paritaria suspendida por la negativa a discutir de las empresas, las conciliaciones obligatorias dictadas a partir de nuestras medidas de fuerza y una serie de estrategias dilatorias con las que pretenden llegar a fin de año sin discutir paritarias ni recomponer nada. Cumpliendo de hecho la máxima de los empresarios: congelar sueldos mientras tengan congeladas las tarifas”.

“En este contexto, después de cinco meses de negativa de las patronales, los dirigentes que conforman la Mesa de Unidad Sindical acataron las conciliaciones sin consultar con las bases. Misma estrategia empleada para proponer un magro 22% de aumento salarial para el semestre, al que las empresas contraofertan un miserable 7 por ciento. Por eso decimos que esta dirigencia sindical no quiere luchar, no quiere apoyarse en la fuerza de la gente y termina adaptándose a lo que quieren las empresas.

Durante la semana pasada, las y los trabajadores telefónico protagonizaron jornadas de lucha en pos de visivilizar este conflicto: la Mesa de Unidad Sindical llamó a un paro nacional que consistía en una retención de tareas que se realizó el martes 3 de Noviembre sin movilización, y tuvo una adhesión del 90%. Hecho que confimaría, según Devoto, que hay disposición y fuerza en la base para pelear por la recompisción salarial.

“Con esto en mente -contó el dirigente- desde la Granate-Blanca ya teníamos convocada la “Caravana por la Dignidad y el Salario” que tuvo lugar el jueves 5; contó con mucha participación física (pese al marco de la pandemia) y en las redes sociales. Salimos desde Congreso, pasamos por el Ministerio de Trabajo, tomamos Avenida Corrientes, pasamos por el edificio de Telefónica y terminamos en el bajo en el edifico de Telecom.

Consultado sobre los reclamos de la jornada, Devoto fue contundente al marcar que, como oposición a la conducción del FOETRA, llevaron otro pliego de condiciones entre las que figuran el reclamo por la democracia sindical con asambleas de edificios virtuales y plenarios de delegados virtuales para definir los pasos a seguir y discutir de cara a los compañeros y compañeras la recomposición salarial, ya que ese 22% propuesto por la dirigencia no fue puesto en discución.

“Basicamente – sostuvo Devoto- para nosotros ningún telefónico puede tener ingresos por debajo de la canasta básica familiar, que hoy es de 73.400 pesos, el equivalente a la canasta familiar elaborada por los trabajadores de ATE INDEC”.

“Las empresas mejoraron mucho sus ingresos -continua Devoto – primero porque hay más personas conectándose por necesidad de teletrabajo, estudios, etcétera. Por otro lado las tarifas siguen siendo altas por estar dolarizadas a pesar de estar congeladas. Pero además, a raíz del teletrabajo, la empresas se están ahorrando gastos operativos (alquileres, limpieza y seguridad, que no necesitan) y por otro lado cargan otros costos en las espaldas de las y los trabajadores, ya que no pagaron ni la electricidad, ni la conección a internet de los hogares, asi como tampoco le dieron a nadie computadoras, sillas, escritorios ni nada: la mayoría de quienes teletrabajan lo hacen con sus propios elementos porque desde que comenzó la pandemia, el Gobierno dispensó la obligatoriedad de las empresas de pagar esos gastos”.

“Que los trabajadores somos esenciales porque Producimos la riqueza y queremos discutir su distribución, quedó más claro que nunca -asegura Tomás Devoto – porque demostramos que los servicios siguieron funcionando, se mantuvo el funcionamiento de la economía basada en la fuerza de trabajo y las empresas siguieron facturando cada vez más. O sea, está demostrado que el trabajador es esencial, que el trabajador es el que genera la riqueza y nosotros creemos que esa riqueza está mal distribuida y por eso los telefónicos estamos reclamando una recomposición salarial que no nos quieren dar. Y una recomposición salarial real que tiene que ser que ningún trabajador tiene que estar por debajo de la canasta familiar. Y se declara esencial porque son actividades donde los trabajadores ponemos mucho de nuestro saber, en este caso en una industria como las telecomunicaciones, que tiene un desarrollo tecnológico muy importante. O sea, se va desarrollando mayor tecnología, los trabajadores nos adaptamos, también creamos, porque también el saber sale de ahí, de la capacidad del obrero de poner su conocimiento, su experiencia y su saber. Y eso se lo llevan las empresas”.

“Además, los trabajadores también tenemos que discutir -como generadores de la riqueza y la ganancia- qué modelo de empresa queremos y qué modelo de telecomunicaciones. Nosotros, particularmente desde Telefónicos en CTAA y desde la Corriente Nacional, creemos que hay que recuperar la soberanía de las telecomunicaciones, no pueden estar en manos de estas empresas que se crean, que toman las telecomunicaciones como una mercancía, cuando las telecomunicaciones son un derecho humano declarado por la ONU. Por eso nosotros creemos que la discusión de la actividad y de la soberanía de las telecomunicaciones, el Estado tiene que recuperar el control de las telecomunicaciones, garantizarlas creando una empresa pública de comunicaciones sumando a ARSAT y a las demás empresas. Creemos que hay que re estatizar las empresas y las telecomunicaciones tienen que volver a manos del Estado con una empresa con carácter pública, donde sean parte los trabajadores, los usuarios, las universidades que están en la actividad, tiene que ser una empresa gestionada desde esos sectores que son los que producen el conocimiento, el laburo y el desarrollo de las telecomunicaciones. Por eso, no es solamente es pelear la riqueza con el salario y mejores condiciones, sino discutir el problema de fondo, que tenemos que recuperar las telecomunicaciones, y eso es recuperar soberanía comunicacional. Eso es lo que pensamos desde Telefónicos de CTAA”.

Plata para los jubilados hay, lo que falta es voluntad política

El Gobierno Nacional anunció ayer que la Comisión Bicameral tendría definida la fórmula de movilidad para los sueldos de las y los jubilados a partir de 2021. Esta fórmula no recompone lo que los jubilados llevan perdido desde 2018 y lleva a plantear como subsanarlo.

* Por Secretaría de Previsión Social CTAA Capital

El reciente anuncio sobre una nueva fórmula de movilidad para los sueldos de los jubilados, a partir de 2021, sin recomposición de todo lo perdido, da cuenta de una decisión política que relega la cuestión de la propia vida de uno de los sectores más vulnerables de la sociedad, en función de atender otros asuntos.

En efecto, los haberes jubilatorios perdieron 6% en el «empalme» de las leyes de movilidad en 2018, un 19,5% durante los años 18 y 19 y, en lo que va del año, apunta a superar otro 20% de pérdida. Con esta pérdida de casi un 50%, los haberes mínimos, quedaron en una cifra que no llega ni a la cuarta parte de la canasta básica.

Recomponer esta situación antes de comenzar con la nueva movilidad es claramente posible, a condición de tomar las decisiones políticas correctas. Restituyendo, solo para las grandes empresas, los aportes patronales eliminados en la década del ’90, estableciendo un impuesto extra del 0,75% a los grandes patrimonios y blanqueando la situación, de al menos la mitad de los trabajadores hoy precarizados, los números «cierran».

El problema no es económico; es político.

Estamos convencidos de que el Frente de Todos, al que la mayoría de los argentinos votó para terminar con la impronta neoliberal, se debilita con el rumbo que plantea para la política previsional. Se debilita porque provoca el desánimo de la gran masa de jubilados que vuelve a sentirse «el último orejón del tarro» y que le mintieron con la promesa de campaña del 20% de recomposición. Se debilita, porque insiste en el rumbo de ajuste (Presupuesto 2021 para muestra) y no valora el fortísimo efecto reactivador que supondría sacar a siete millones de jubilados de la pobreza. Se debilita porque cede, porque otorga a los poderes económicos concentrados, porque en lugar de «movilidad» de la que habla la Constitución, piensa en «indexación» como le dice el FMI, porque no se apoya en un pueblo que ha demostrado sobradamente que está dispuesto a hacer valer sus derechos en las calles.

¡Recomposición ya, de los haberes perdidos!. ¡Ningún jubilado por debajo de la línea de pobreza!. ¡Por una fórmula de movilidad que no nos haga perder frente a la inflación!. ¡Por la recomposición de los ingresos de ANSES y la reparación del FGS vaciado!

Secretaría de Previsión Social CTAA Capital

11 de noviembre de 2020

Nelli: “Si no se cuida a los trabajadores de la Salud, no se puede cuidar a la población”

En el marco de la Jornada Nacional de Defensa del Equipo de Salud, convocada por la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FeSProSA-CTAA), las y los compañeros del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de la OSPLAD (SiTOSPLAD-CTAA) se movilizaron esta mañana desde el Ministerio de Salud hasta la sede de la Obra Social Docente.

* Por Valeria Garay

Con paros y movilizaciones en todo el país, se realizó hoy una nueva Jornada Nacional de Defensa del equipo de Salud, convocada por el FesProSA, para exigir salarios dignos, el fin del trabajo precario y protección de las y los trabajadores.

En este contexto, trabajadoras y trabajadores de la Obra Social Docente, organizados en el SiTOSPLAD-CTAA, se concentraron junto a otras organizaciones, a las 11 de la mañana frente al Ministerio de Salud de la Nación, en la esquina de Lima y Moreno, donde ofrecieron una conferencia de prensa.

Allí, frente al Ministerio, Hebe Nelli, secretaria General Adjunta del SiTOSPLAD-CTAA y secretaria Gremial de la CTAA Capital, expresó: “Hoy pretenden reducirnos el salario a la mitad a más de 800 trabajadores y trabajadoras de la Obra Social Docente. Pretenden que 800 de casi 1500 trabajadores ganemos entre 12 y 15 mil pesos. Los mismos gremios que en su propia paritaria plantean un montón de cuestiones, a la hora de ser patrones se olvidan. El SiTOSPLAD es un gremio incómodo, porque viene a poner sobre la mesa esta discusión, y es un gremio al que no pueden comprar, por eso han decidido proscribirnos.”

“Estamos acá para decirle a Ginés González García, ministro de Salud y a Eugenio Zanarini, Superintendente de Servicios de Salud, que son ellos quienes tienen que darnos una respuesta a las y los trabajadores de la Salud, que son ellos quienes no garantizaron los elementos de protección personal en el inicio de la pandemia, que pueden sumar un montón de camas de terapia intensiva, pero el personal de salud capacitado con la formación necesaria para hacer ese trabajo no se reproduce de manera espontánea y que si no se cuida a los trabajadores de la Salud, no se puede cuidar a la población”, agregó Hebe, desde la puerta del Ministerio de Salud de la Nación.

Al finalizar el acto, que fue parte de la Jornada Nacional convocada por el FeSProSA-CTAA junto a cuarenta organizaciones del campo de la Salud para rechazar el ajuste, las y los compañeros del SiTOSPLAD-CTAA marcharon hasta la sede de la Obra Social Docente, para reclamar paritarias representativas, exigir el aumento salarial adeudado y rechazar el proyecto de rebaja horaria y salarial del 50% para 801 trabajadores.

Ya en la puerta de la OSPLAD, José “Pepe” Peralta, secretario General Adjunto de la CTAA Capital, expresó: “Nosotros como CTAA somos la alternativa que se creó justamente ante la entrega de los grandes monopolios sindicales cuando se convirtieron en sindicatos empresariales, durante el menemato. Por eso, fue la valentía de algunos sindicatos y dirigentes que en aquel momento crearon la CTA para darle contenido a la lucha de la clase trabajadora. Desde aquel entonces y hasta ahora , lo que hacemos desde la Central es acompañar al trabajador en su organización y en su lucha. Siempre el trabajador es el que decide su destino, el que se organiza para luchar y para que no lo atropellen las patronales”.

Para finalizar el acto frente a la Obra Social Docente, Hebe Nelli agregó: “Lo positivo de esta acción es que no estamos solos, estamos organizados y organizadas de manera colectiva. Los trabajadores no tenemos precio, el SiTOSPLAD-CTAA no tiene precio. La patronal nos ha insinuado la posibilidad de recorte de horas de trabajo y lo que le respondimos automáticamente fue “primero hablemos de los ñoquis y después hablemos de los trabajadores”. Y no queremos decir que resolviendo el problema de los ñoquis se resuelve el problema de la Obra Social, porque acá hay un problema más grande, que es el sistema de obras sociales, cómo se negocian las cuestiones de la política a partir de la plata de las obras sociales y el sistema de tecerización de servicio, a través del cual triangulan el dinero.”

Los y las trabajadores de la OSPLAD perciben salarios muy inferiores a la canasta básica desde el año 2018, a pesar de haber sido el sostén de las prestaciones médico-asistenciales que está brindando la obra social durante la pandemia, con el agravante que desde el mes de enero hasta el mes de julio padecieron el pago fuera de término y de manera fraccionada.

Hebe Nelli: «Tenemos que plantear cosas que vayan más allá de lo posible»

Secretaria Gremial de la regional Capital de la CTA Autónoma, delegada en el sindicato de la obra social docente (SITOSPLAD), trabajadora, estudiante de Derecho y mamá. Con una perspectiva de género, clase y raza, Hebe invita a reflexionar sobre la militancia sindical desde la interseccionalidad.

* Por Ana Flores Sorroche, para Infogremiales

Se llama Hebe, con hache y be larga, como no se pudo llamar la mamá de su mamá por alguna regla que existía antes pero en 1985 ya no. Porteña, de nacimiento a la fecha. Sus padres se separaron antes que ella cumpliera un año y se fueron del barrio de Paternal al de Boedo con su mamá y su hermano a vivir con la abuela Eve y sus tíos. Su papá se quedó en la casa original, se volvió a casar y tuvo más hijos. «Estoy acostumbrada a familias enormes, no preguntamos de dónde venimos.

Tengo 6 hermanos y hermanas. En los ’90 no era tan común tener una familia ensamblada como ahora, yo era la única con padres separados. Pero siempre fuimos disfuncionales, ya mi abuela se había separado en Mendoza. Resistió el machismo de mi abuelo que fue un hombre maltratador, le hizo la vida imposible.», dice como todo de acá en adelante, sin rodeos. 

De generación en generación

Su bisabuelo paterno era anarquista, sospecha que anarcosindicalista. En Tucumán, cada vez que había algún conflicto, por si las dudas, lo metían preso. «Se batió a duelo con el fachista de su pueblo y lo mató, ganó el duelo. Se terminó viniendo para acá, perseguido.»

Pero la antepasada gravitante fue Eve: «Mi abuela materna era feminista y comunista. Fue presa política, estuvo un año en la cárcel de San Telmo, donde las monjas eran quienes reprimían a las mujeres.» Eve también fue dirigente del «Mendozazo», invisibilizada por sus compañeros y, como en una película, recién él último día de su vida llegó a contar algo de esa época en una carta: «En marzo (de 1972) llegan a los domicilios las facturas de luz con un aumento de más del 300%. Ese fue el inicio de una rebelión generalizada de las mujeres de los barrios populares. Junto con mi querida amiga y camarada Kitty Sosa, desde la 4ta Sección, la llamada «de hierro», pudimos dar impulso al descontento y canalizar la lucha de las vecinas y sus familias…». Eve Jiménez fue elegida para estar al frente de la Coordinadora ‘No Pague La Luz’ que condujo a través de asambleas. En abril, luego de que en una de las tantas protestas y movilizaciones, la represión se cobró la vida de un canillita y la CGT convocó a un paro que se extendió por 3 días hasta que finalmente el gobierno de facto mendocino fue obligado a llamar a elecciones, abrir las paritarias, rebajar las tarifas eléctricas y dar aumento de salarios y jubilaciones. «A quienes deseen un mundo mejor, a las hijas de Kitty, a mis hijos, nietos y bisnietos les dejo este mensaje de lucha por la justicia y la felicidad del ser humano. Queda en ustedes la posta.», cerró.

Atravesada por un legado desde la admiración y el amor, Hebe retoma su historia para leer la que le toca: «Nosotras hemos estado presentes siempre en la militancia, hemos dirigido procesos importantes, nomás la historia no lo ha mostrado. Mi mamá es trabajadora social, me llevaba a las villas donde ella laburaba. Acompañaba a mujeres víctimas de violencia de género cuando de eso no se hablaba.» Desde la primaria que su mamá le explica por qué las mujeres tienen derecho a elegir sobre sus cuerpos, por ejemplo. 

También es hija de Ricardo, quien recopiló los testimonios de trabajadores militantes que formaron parte de la organización del sindicato de trabajadores del ingenio Ledesma. Cuenta orgullosa que «La injusticia cojuda» fue el primer libro que relató La Noche del Apagón de 1976 en la que el régimen militar secuestró a unas 400 personas en Libertador General San Martín, Jujuy, de las cuáles 55 continúan desaparecidas. «Me crié con tres referencias básicamente, mi abuela, mi mamá y mi papá.»

Hebe

Casi por decantación, fue a un secundario militante, al Mariano Acosta, donde en 2001 se sumó a las mesas de escrache popular. La forma de organización interna que le dieron al centro de estudiantes fue horizontal, con voceros, coordinadores y comisiones. Hebe participaba de la comisión de DDHH, también era coordinadora pero huía de la vocería. «Había sobradas personas que querían ocupar ese lugar, yo no quería. Quizás esa cosa de ser ‘abnegada en la lucha’.», piensa en voz alta. 

A los 15, 16 años empezó a hacer changas para juntarse unos mangos para ella y por esa formación «obrerista». Después estudió Edición y Producción en el Instituto Superior de Enseñanza Radiofónica, más conocido como ISER. «Siempre detrás de cámara», se ríe. «El proceso de aprender a hablar frente a un micrófono lo tuve que aprender a la fuerza.» Fue gracias al impulso de su secretario general, Alejandro Bassignani, que huye del protagonismo.

Entró a trabajar en la obra social docente (OSPLAD) a los 19 años, en el 2005. Empezó en el call center pero como militaba en el barrio «Ramón Carrillo» en el marco del plan «Yo sí puedo» de alfabetización, consiguió traslado para trabajar en un plan de culminación de estudios para trabajadores de la obra social, como facilitadora. «Acompañamos a muchos trabajadores a terminar sus estudios, particularmente recuerdo con mucho cariño a las trabajadoras de maestranza de OSPLAD, que eran de pueblos originarios y me abrió mucho la cabeza al tema. Pero, lamentablemente, esa historia terminó muy mal para mí.» Hebe exigió explicaciones a la jefa por un grupo de docentes precarizadas a las que no les estaban pagando: «Me gritó, me amenazó, me zamarreó del brazo. Yo tenía 22 años.» La denunció y se cambió de sede. 

Tres mujeres militantes

En el 2008 pasó a ser administrativa del departamento de Trabajo Social en la sede central donde conoce al SITOSPLAD. «Me afilio y el sindicato empieza a hacer elecciones de delegades en todas las sedes. Con otras dos compañeras, fuimos las primeras tres delegadas todas mujeres en la sede.»

Mujer, joven y con sólo 5 años de antigüedad, sus representados y representadas la prejuzgaban, la consideraban una «bebé» y una trabajadora hasta llegó a hacerle el gesto de que para llegar al cargo había «revoleado la cartera». «Previo a cada asamblea recorría todos los pisos, trataba de hablar en cada oficina, muchas compañeras y compañeros me daban vuelta la cara, ni me miraban. Yo hablaba igual.» 

Hasta que en su primer conflicto consiguió en una negociación el pase a planta de permanente de nueve odontólogos que estaban como monotributistas hacía muchos años, con el correspondiente salario y el reconocimiento de las vacaciones y la antigüedad, cosa que, en general, no se reconoce. 

El quiebre con la maternidad idealizada 

En 2011 fue mamá y el cambio le costó. Pasar de ser una persona independiente, hiperactiva, enfocada a otra más vulnerable, que cambia, que necesita ser cuidada no es fácil pero cuando el bebé nació al menos hubo muchos brazos dispuestos a ayudar. «Fui secretaria de prensa durante cuatro años. En ese momento había tenido a mi hijo y la militancia gremial me salvó de algo que podría haber sido depresión post parto. Estaba abrumada, me costó muchísimo la maternidad al principio. Iba a las reuniones de comisión directiva y mis compañeras me decían ‘Dejámelo, yo te lo cuido’ y yo ‘Sí, tomá’. Mi hijo iba a las marchas desde la panza, me tuvieron que ordenar reposo para que dejara de hacer cosas.» Al poco tiempo de nacer su hijo se separó. «Nadie decía cómo es realmente la maternidad, me pesaba la ‘maternidad rosa’, lo que atraviesa un cuerpo en un embarazo no es poco, te obliga a bajar la velocidad. Eso lo aprendí con los años, que hay que aprender a poder parar y darse cuenta que la historia va a pasar o a dejar de pasar, estés o no estés.», considera.

Y agrega: «De alguna manera, la alienación en la que vivimos no nos permite escuchar lo que le pasa al cuerpo. Yo no sé si es tan bueno que una mujer que tiene un hijo a los dos meses vuelva a trabajar. No estoy diciendo que si una madre quiere volver a trabajar no pueda hacerlo, pero también está el verso de la libertad, que en realidad es devolverte a la productividad y que el pibe se críe solo.»

«Género, clase y raza»

Hebe considera que «los privilegios no pueden estar en ninguno de estos tres ejes de opresión, género, clase y raza», siguiendo la línea del feminismo interseccional: «Creo que las mujeres sindicalistas tenemos que poder hablar por la clase trabajadora, tenemos que poder hablar de los convenios colectivos de trabajo, de los acuerdos salariales. Tenemos que poder discutir todo, no sólo las licencias por maternidad, que también es importante, pero hay mucho más.»

«Cómo puede ser que el sindicato del vestido, un gremio con predominancia de trabajadores inmigrantes tenga un porcentaje máximo para extranjeros. Eso es racismo. Existe en Estados Unidos, con los afroamericanos, pero acá también existe, con los pueblos originarios, con los inmigrantes.», señala.

Por otra parte, apunta también que «ser mujer» no es garantía de perspectiva de género: «Tenemos varias jefaturas intermedias con mujeres que son muy violentas con los trabajadores, como me pasó a mí. En OSPLAD hay varios casos en los que las jefas avalan la violencia machista y en otros son ellas las violentas directamente.»

Pero qué pasa cuando la mujer sindicalista, a la que le costó llegar a un lugar estratégico, se juega el cargo en exponer un conflicto: «Yo creo que ese problema es ideológico. Yo soy de la idea de que somos trabajadoras y sólo debemos darle respuestas a la clase trabajadora. A mí el cargo no me importa. Si empezás a depender de alguien, lo que te interesa es retener el cargo, ¿de qué manera?, ¿debiéndole favores a alguien? El problema es cuando querés vivir del cargo.»

Ahora, aunque Hebe podría no presentarse a trabajar debido a sus múltiples tareas gremiales, prefiere presentarse a trabajar cada vez que puede, al menos tres veces por semana, en su puesto de auxiliar de trabajadores sociales, entrevista pacientes, releva variables sociales y carga los datos para su análisis. «Quiero poder entrar al laburo sin agachar la cabeza». Le ofrecieron la Secretaría Gremial de la regional Capital de la CTA Autónoma y ella tuvo que advertir que el día tiene 24 horas, porque entre el trabajo, su hijo, su casa y que se puso a estudiar Derecho, no hay cuerpo que aguante, pero «hay muchos compañeros en la central que bancan muchísimo. De hecho, la CTA Autónoma se propuso cumplir con el 50% de mujeres en listas, y no en cargos testimoniales, y que se haya elegido que una mujer ocupe una Secretaría Gremial no es poca cosa.», reconoce.

En OSPLAD, sin ir más lejos, padecieron un año muy duro. «No nos pagaron en tiempo y forma, con horarios desdoblados, salarios de miseria. Cobramos entre 30 mil y 25 mil pesos en cuotas y ahora la patronal viene a proponer recortarnos el salario a la mitad a 800 trabajadores. Yo cobro 15 mil pesos. Y Ctera es mayoría en el consejo de administración por lo que tiene la responsabilidad absoluta de eso. No sé cómo pretenden que vivamos con 15 mil pesos.» La obra social está fundida y concursa un Procedimiento Preventivo de Crisis en el que sugieren recortarle el salario por la mitad al 60% de la planta.

Hablar de lo imposible para que sea posible

«Tenemos que plantear cosas que vayan más allá de lo posible», afirma, pero ¿qué pasa cuándo los planteos profundos y necesarios chocan con realidades concretas?: «Es muy delicado. El sindicalismo es ingrato, mi papá me lo dijo y es verdad. Venimos de una derrota ideológica muy grande. Hay gente que cree en el sindicalismo delivery ‘A ver, vos, qué me vas a dar’, y esto la burocracia sindical lo aplaude. También las patronales, que son antisindicales. Hasta el ministerio de Trabajo, más allá de los gobiernos, que suele tender a no querer negociaciones paritarias colectivas. Nosotros hoy somos el gremio mayoritario en OSPLAD y hoy están negociando un Procedimiento Preventivo de Crisis sin nosotros.», evalúa.

«Por eso tenemos que pensar en un proyecto de país, aunque parezca imposible. Hay que verbalizarlo para que podamos verlo como una posibilidad. Las mujeres y disidencias tenemos experiencia en esta pelea, hace 20 años en los Encuentros Nacionales de Mujeres parecía imposible hablar de aborto en el Congreso y hoy es una realidad. La pandemia hoy te da la posibilidad de repensarlo todo en términos objetivos. Hay que estar dispuestos en términos subjetivos a revisarlo porque lo que se plantea como imposible es lo necesario. Hay que discutir la propiedad de la tierra, la distribución de la riqueza y recordar que esto que tenemos no es lo natural, es creado.», apunta.

Hebe argumenta: «Las mujeres somos outsiders, por eso podemos pensar las cosas desde afuera. Una boludez, pero cuando se juntan a discutir paritarias ¿cómo rompen el hielo? Hablan de fútbol. Eso los iguala a todos. En cambio cuando estoy yo, que no me interesa el fútbol, ya entro desde otro lugar. Hay códigos distintos. Y no es que no tenemos estrategia, tenemos otra estrategia.»

Acaso podamos mencionar la frase de Malena Pichot «Enojate, hermana». Dejar los debates en una laxitud complaciente da a entender que hay una base de acuerdo en que el ‘status quo’ está mal pero no tan mal: «Siempre me dijeron la frase ‘el que se enoja pierde’ ¿Por qué? Hay que enojarse, ser estratégicos, saber golpear y tener un proyecto colectivo. No hay que ser un boludo que la pudre solo por todos lados, hay que tener un proyecto colectivo consensuado. Pero no enojarse es no tener sangre en las venas. Los estallidos sociales son enojos.»

Ahora bien, el clasismo afirma que es la clase trabajadora la antagonista necesaria de quienes son propietarios de los medios de producción por lo que debería protagonizar los enojos. Qué pasa cuando hay cantidades masivas de oprimidos más oprimidos que los oprimidos. «Ahí estuvo visionaria la CTA en definir que trabajadores somos todes, ocupados y desocupados. El riesgo ahí creo que es el de institucionalizar la precarización, eso hay que discutirlo. La organización sindical anquilosada para otro modelo de país de pleno empleo que hoy no existe no tiene sentido pero la ley 23.551 hay muchos que no la quieren tocar porque hay mucha plata en el medio.», lanza. 

El planteo no es fácil pero Cristina Fernández de Kirchner le da la razón a una Hebe pelilarga cuando la comparte en este video en pleno 2017 macrista: a veces hay que enojarse y poner la fecha. Click en el link para ver el video >>> https://www.facebook.com/watch/?t=3&v=1455377281193469

Fuente: Infogremiales | infogremiales.com.ar

6 de noviembre: Día del trabajador y la trabajadora bancaria

Desde el año 1924, cada 6 de noviembre se celebra en Argentina el Día de la Trabajadora y el Trabajador Bancario. A propósito de esta fecha, las y los compañeros del Sindicato de Trabajadores de Entidades Bancarias (SiTEBA-CTAA) elaboraron el comunicado que se difunde a continuación.

Este día del bancario nos encuentra en una situación difícil, como a todos los trabajadores. La pandemia y la crisis económica nos golpean fuerte, pero sabemos que somos expertos en campear las tormentas si estamos organizados y en unidad. Hoy debemos enfrentarnos a algunos temas importantes que tienen que ver con nuestra salud, el salario y las condiciones laborales.

Salud

Muchos compañeros y compañeras están en la primera línea de batalla, atendiendo al público y muchos bancos no cumplen los protocolos poniendo en peligro la salud de los trabajadores y trabajadoras. Así también, a lo largo y ancho del país, con el ataque del virus comienza a faltar personal y están convocando a las sucursales a personas que -por la edad o enfermedad que padecen- son de riesgo.

A otros tantos los han destinado a realizar teletrabajo. Muchos de estos, por su tarea, no tienen ninguna preparación previa para la venta de productos, por lo cual se les somete a una gran presión psicológica. Ni hablar de los muchos a los que no les dan los elementos necesarios para trabajar en condiciones adecuadas -como las sillas ergonómicas- y terminan afectados de la espalda o columna.

Salario y condiciones laborales

En este punto es importante que todos y todas asumamos el compromiso con los miles de compañeros tercerizados, que realizan el trabajo de un empleado bancario y que no gozan del reconocimiento como tal. Esto significa que por el mismo trabajo cobran mucho menos y no perciben los beneficios que tenemos quienes pertenecemos al gremio. Una tremenda injusticia.

Otro tema a remarcar es que el aumento salarial que se ha firmado es en cuotas y uno de los más bajos que han acordado los gremios en las paritarias de este año. Esto se da en uno de los sectores -el financiero- que sigue acumulando ganancias extraordinarias y en el marco de un aumento constante del costo de vida. Es alarmante la caída de nuestro salario.

Algo importante a tener en cuenta de lo que nos sucede es que en nuestro gremio ya casi no existe la Carrera Bancaria y que, por lo contrario, hay muchos casos donde se rebajan los coeficientes que figuran en el convenio 18/75.

Estos son sólo algunos puntos que demuestran la situación difícil que vivimos. Pero en esta fecha tan importante necesitamos acudir a la memoria para saber dónde apoyarnos y mantenernos firmes a la hora de exigir por nuestros derechos.

Nuestro legado

En este sentido, siempre es valioso recorrer las grandes luchas de nuestra historia y, sin duda, la más heroica es la gran huelga del año 1958.

El 28 de enero de 1958, en los finales de la dictadura de Aramburu, los bancarios lanzaron un paro por tiempo indeterminado que duró 52 días. La huelga transcurrió entre movilizaciones como la del 26 de febrero, con 10.000 bancarios y bancarias que ocuparon el centro financiero y una dura represión. El gobierno militar detuvo a 8000 compañeros y unidades de la Infantería de Marina y de la Policía se ubicaron en las instituciones financieras. Sin embargo la medida hizo que la huelga se extendiera. La bronca y solidaridad eran generalizadas.

Los trabajadores reclamaban cuatro puntos: reincorporación de todos los cesantes, libertad para todos los detenidos, aumento salarial, levantamiento de la movilización militar. El 16 de marzo todos los puntos fueron aceptados.

Hacernos cargo de nuestra realidad

Por supuesto que existen muchos otros combates importantes que libramos junto al resto de la clase trabajadora de nuestro país y es esencial refrescarlo en la memoria porque esos son nuestros genes y a ellos debemos acudir cuando la tormenta nos amenaza.

Este es nuestro legado para pararnos hoy. Para exigir que se cumpla con el Protocolo de protección de Covid 19 y se concreten los Comités Mixto de Salud e Higiene en cada banco; para pelear porque todos los que realizan tareas de bancarios sean reconocidos y reconocidas como tales; para que el teletrabajo se realice en condiciones dignas, con todos los derechos y que sea temporario y voluntario. Por la Carrera Bancaria y por el salario que nos merecemos.

Por una nueva Ley de Entidades financieras que suplante a la actual, impuesta por la dictadura militar, que ponga a las Entidades Financieras al servicio de los intereses de nuestro pueblo.

Resolver esta situación a nuestro favor para vivir mejor es compromiso de todos. En este Día del Bancario desde SITEBA asumimos este compromiso, dispuestos a aportar todo nuestro esfuerzo por la unidad y la organización de los trabajadores y trabajadoras del Sistema Financiero. Siempre apostando a la construcción de más democracia sindical y más participación consciente.

Tosco, el Hijo del Pueblo

Se cumplen 45 años de la desaparición física de Agustin Tosco, el “Gringo”, que no sólo representa el sindicalismo combativo y revolucionario y consignas históricas reivindicativas, sino que también, su práctica irrumpe instalando una necesidad de debate teórico y práctico que interpela al movimiento obrero hasta la actualidad. El valor de las palabras y la práctica de Tosco se basa en su condición de clase: como militante popular, trabajador y dirigente sindical.

* Por Nicolás Honigesz, Directore de Prensa CTAA Capital

Agustín Tosco cumplió su función de dirigente desde su lugar de trabajo. Vale destacar que no tenía licencias gremiales. Por años, sus licencias eran acordadas para determinados momentos, siguió trabajando en Villa Revol hasta el momento que tuvo que pasar a la clandestinidad. De origen muy humilde, siempre fue un gran aficionado a la lectura, lo que dio lugar a una formación autodidacta y permitió superar su timidez.

Con 19 años, fue elegido subdelegado y un año más tarde delegado. En 1952 fue electo Secretario del cuerpo de delegados de Luz y Fuerza de Córdoba, y la edad de 24 años, en 1954, fue elegido Secretario Gremial del secretariado nacional de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza. Entre sus principales definiciones encontramos su razonamiento ideológico: “Soy marxista-socialista, sobre la base del materialismo dialéctico». Y en cuanto a lo político: «dice estar por la unidad de las fuerzas de distintas tendencias, sin discriminaciones ideológicas, con la condición de que debían coincidir con la liberación nacional de los argentinos”.


Quienes tuvieron la oportunidad de trabajar con Agustín Tosco, destacaban siempre su actitud docente, sin mezquindades, siempre brindando y trasmitiendo sus conocimientos desinteresadamente. Él mismo decía: “No hay mezquindades, se debe ser un muy buen trabajador y un mejor dirigente sindical”.

Agustín Tosco afirmó que: “El dirigente obrero es un agente fundamental de la política y que los sindicatos deben llevar adelante una política general y no partidaria, que contemple el beneficio de todos los compañeros que tengan distintos pensamientos». Se trataba de pensar en la defensa del interés común. Tosco definió a la clase obrera como el agente esencial de la liberación nacional y social, siendo este proceso esencialmente político. Jugó un papel preponderante en la discusión sobre el rol del Estado y al respecto afirmaba que: “El estado es una estructura política y jurídica, que regula las relaciones sociales y económicas, empleando el aparato represivo y que está sometido a la presión financiera internacional y a las clases poseedoras”.


Él planteaba un sindicalismo dispuesto a disputar en todos los espacios, pero teniendo en claro que sólo la democracia de bases es la forma, y que ésta no puede ser suplantada por otro planteo. Esa relación que existe y debe haber entre dirigentes sindicales y bases, es la que logra la concientización y compromiso de las mismas.


Frente a las infinitas acusaciones de “anti-peronista” por parte de las burocracias sindicales, que pretendían el adoctrinamiento partidario del movimiento obrero, Tosco respondía: “Yo no soy anti-peronista, siento un gran afecto por muchos compañeros peronistas, convivo y lucho con ellos. En perspectiva pretendo esa unidad combativa con los compañeros peronistas y con las fuerzas de izquierda y revolucionarias.”


Para Tosco, la alianza social “anti-imperialista” debía estructurarse en una alianza política concreta con sectores “de avanzada” de los partidos políticos patronales. En palabras de mismo Tosco: “No tengo mayores diferencias con el sindicalismo peronista que levanta las banderas de la liberación nacional y social de la patria (…) mi posición es el respeto a las diferencias partidarias y a la concreción de la unidad de acción en la lucha, recorriendo todos los caminos necesarios para construir una funcionalidad cada vez mayor entre las alas progresistas de esos dos grandes movimientos populares (Peronismo y Radicalismo) y el resto de los sectores políticos de izquierda, la unidad popular necesita del peronismo revolucionario. Necesita del radicalismo y de los sectores que van hacia la izquierda”.


Una lucha a fondo contra la opresión imperialista implica la movilización revolucionaria de las masas, algo que la burguesía nacional no está dispuesta a realizar. Por eso se convierte en un freno a la lucha antiimperialista, quedando entonces planteada como una tarea de las masas bajo la dirección del proletariado organizado de manera independiente.

Tosco fue todo lo contrario del fanático adoctrinado, o el militante obsecuente, es el ejemplo desde la praxis del dirigente anti-burócrata. “Siempre es necesario encontrar las coincidencias para la acción y para la lucha en base a la unidad. Con ello lograremos los triunfos que anhelamos. Como lo enseña la historia del movimiento obrero”. Lo pensó, lo escribió y lo llevó a cabo. Tosco es el puño cerrado, el obrero de overol, el dirigente sindical que pelea en la calle.

Otra destacable cualidad fue la de no caer en discusiones interminables sobre personalismos. Cuando había una demanda y una necesidad de la clase trabajadora, la ponía en la primera línea, lo tomaba como algo natural, frente a los bastones largos y o uniformados. Fue un heredero o un alma perdida de aquellos fundadores del sindicalismo argentino a principios del Siglo XX con asambleas de trabajadores, inmigrantes de distintos idiomas al mejor estilo torre de babel donde se escuchaba la voz de todos.


Tosco no tenía necesidad de levantar la voz, sus palabras eran simples y llanas, hablaba con la verdad. Fue un dirigente de overol, que luchaba en la calle y hablaba y resolvía en asamblea. No hay mucho que interpretar. Él era lo que los demás resolvían –pero siempre dando su opinión– y luego se marchaba en la misma dirección. No dirigió sino que acompañó las explosiones populares poniéndose al frente de la voluntad popular. Tosco es el hijo del pueblo.


A fines de octubre de 1975 en plena clandestinidad y sentenciado a muerte por la Triple A, con graves problemas de salud tratables a tiempo en condiciones normales, fue internado en Buenos Aires con un nombre falso. Agustín Tosco murió en Buenos Aires el 4 de noviembre de 1975, a los 45 años. Sus compañeros llevaron su cuerpo sentado en el asiento del acompañante de una ambulancia hasta la ciudad de Córdoba.

Oficialmente murió en Córdoba el 5 de noviembre.
 El cuerpo fue velado en el domicilio particular de un dirigente de Luz y Fuerza y luego trasladado al Club Redes Cordobesas, donde se montó la capilla ardiente. A su entierro concurrieron unas 20 mil personas, pese a las amenazas de la Triple A. Al llegar el cortejo al cementerio San Jerónimo (de Córdoba), unos cuantos matones, apostados en los techos de los panteones, dispararon contra la concurrencia dejando varios heridos. Un grupo de trabajadores dejó el féretro en una bóveda ajena y recién por la noche lo trasladaron al panteón de Unión Eléctrica, donde sus restos permanecen hasta hoy.

Spataro: “Esta ciudad sigue profundizando la pobreza y la desigualdad”

La CTAA Capital participó este mediodía de una masiva concentración en el Obelisco porteño y movilizó desde ahí hasta el Ministerio de Hacienda de la Ciudad de Buenos Aires para reclamar el reconocimiento salarial de las y los compañeros que realizan tareas Esenciales en los espacios comunitarios, más alimentos para dichos espacios y que se cree un Fondo de Fomento para las Economías Populares.

* Por Valeria Garay

Alrededor de 5 mil compañeros y compañeras organizadas en la CTAA Capital, FeNaT-CTAA Capital, Somos Barrios de Pie, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), la Federación de Organizaciones de Base (FOB), el Movimiento Evita, la CCC y MP La Dignidad, entre otras organizaciones, protagonizaron hoy una masiva jornada de lucha.

A partir de las 11 de la mañana las distintas columnas se fueron concentrando en el Obelisco porteño y cerca del mediodía comenzaron a marchar hacia Rivadavia y Saenz Peña, donde se encuentra el Ministerio de Hacienda de Buenos Aires.

Allí, desde un escenario improvisado frente a las puertas de Hacienda, Pablo Spataro, secretario General de la CTAA Capital, expresó: “Venimos una vez más a denunciar este modelo de hambre que viene llevando adelante el Gobierno del PRO durante todos estos años. Esta ciudad, que es la más rica del país, sigue profundizando la pobreza y la desigualdad. En esta ciudad, que tiene un presupuesto equivalente a las principales ciudades europeas, hay más de un millón de pobres y 480 mil personas no pueden cubrir una canasta básica de alimentos. Por eso, es importante estar hoy acá con el conjunto de las organizaciones populares, no solamente porque venimos denunciando desde hace muchísimos años este modelo de hambre y de exclusión, sino porque le hemos puesto el cuerpo. Porque son nuestros compañeros y compañeras las que están al frente poniendo el cuerpo para que no haya hambre en las familias”.

“Estamos acá por las y los trabajadores que tienen el reconocimiento de toda la sociedad, menos de este Gobierno. Estamos acá para exigir el reconocimiento salarial de cada uno de ustedes; porque es mentira que no hay plata, esta ciudad que tuvo un superávit fiscal de 90 mil millones de pesos en el primer semestre nos tiene que dar una respuesta. Por eso exigimos refuerzo alimentario para todos los comedores, merenderos y ollas que hoy están haciéndose cargo de esta situación social. Por eso exigimos un Fondo de Emergencia para las y los trabajadores de la Economía Popular, para alentar el trabajo cooperativo y asociativo, para alentar las experiencias productivas y para hacer las obras que hacen falta en nuestros barrios. Por eso, compañeros y compañeras, hoy estamos acá dando una muestra de unidad y de la fortaleza que tenemos las organizaciones populares en este territorio”, concluyó de manera contundente Pablo Spataro.

Por su parte, Omar Giuliani, Coordinador Nacional de la FeNAT-CTAA, agregó: “Estamos nuevamente aquí en la calle, reclamando al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que los trabajadores que desarrollan tareas esenciales deben ser pagos. Hoy, un abanico importantísimo de organizaciones populares, que transitamos todos los días los barrios, estamos generando esta maravillosa jornada, planteando que si somos esenciales el Estado se debe hacer cargo y pagarlo. En la ciudad más rica del país hoy sigue habiendo hambre”.

En la Ciudad de Buenos Aires las organizaciones sociales son las que sostienen las tareas esenciales, alimentando a sus vecinos y vecinas, acompañándolos a los dispositivos sanitarios, brindando información, mientras el Gobierno de la Ciudad continúa mirando para otro lado. Las y los compañeros esenciales necesitan y esperan respuestas urgentes a sus reclamos.

La CTAA Capital participó de la Caravana en defensa de la Costanera

Bajo el lema “La costanera no se vende. La costanera tiene dueños: somos todxs”, la Central porteña participó en la tarde de ayer, domingo 1 de noviembre, de una caravana que llegó a las puertas de ingreso de Costa Salguero.

* Por Valeria Garay

La actividad fue convocada por la coordinadora “La Ciudad Somos Quienes la Habitamos”, integrada por más de cien organizaciones, entre las que se encuentran el Observatorio de Derecho a la Ciudad, la Cátedra Libre de Ingeniería Comunitaria, Basta de mutilar nuestros árboles, el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas de Unidad Popular, Jóvenes por el clima y la CTAA Capital.

La convocatoria tuvo tres puntos de encuentro: a las 14.30 en Plaza Almagro, a las 15 horas en el Planetario y finalmente a las 16 en el Ingreso a Costa Salguero. Hasta donde se acercaron -manteniendo el distanciamiento social y con barbijos- alrededor de 2 mil vecinos y vecinas, en autos, bicicletas o a pie, para defender la Costanera de la Ciudad y decirle no a las Torres.

¡La costanera no se vende!

El pasado 8 de octubre en la Legislatura porteña se aprobó en primera lectura (aún no tiene sanción definitiva), habilitar la venta de la Costanera y autorizar un emprendimiento inmobiliario en el sector de Costa Salguero. Este desarrollo inmobiliario tendrá más de 7 hectáreas y consistirá en un barrio náutico de lujo, en una ciudad con 35% de inquilinos y un 15% de la población viviendo en villas.

Este proyecto se realiza en clara violación de la Constitución de la Ciudad, ya que su Art. 8 establece que: «Los espacios que forman parte del contorno ribereño de la ciudad son públicos y de libre acceso y circulación». Se crea así, una nueva fractura urbana y espacial en la ciudad: un sector mediterráneo desplazado y otro ribereño destinado a la población más rica, que gozará de amplias superficies de espacios verdes, dos reservas naturales, mayor conectividad y viviendas suntuosas con mirada al río.

Franco Armando, secretario de Organización de la CTAA Capital, desde el ingreso de Costa Salguero, expresó: “Una vez más estamos acá, desde la CTAA Capital, acompañando y siendo parte de esta Coordinadora que viene impulsando y defendiendo el Espacio Público, que es patrimonio de todas y todos los que habitamos la Ciudad, diciéndole no a los negocios de Larreta y defendiendo los que es de todas y todos”.

El pasado viernes 30 de octubre, desde la Coordinadora la Ciudad Somos Quienes la Habitamos, presentaron un Proyecto de Ley para la Creación del Parque Público “Nuestro Río” y la desprivatización de la Costanera Norte. Proyecto que deroga todas las leyes que autorizan la privatización de la Costanera, entre ellas, la del Distrito Joven; destina la totalidad de la superficie de los predios de Punta Carrasco y Costa Salguero al Parque Público “Nuestro Río”, y establece mecanismos participativos para definir los usos de futuro parque.

Además, el proyecto propone delimitar un área de Humedal Costero; un área de Investigación-acción Agroecológica y Educación Ambiental; un área de recreación y actividad física; y la instalación de una estación meteorológica experimental para monitorear de manera continua la temperatura, el nivel del río, la calidad del agua, del aire y del suelo, garantizando que la información producida esté disponible y democratizada para el conjunto de la ciudadanía y que cuente programas con fines educativos.

Al respecto de esto, María Eva Koutsovitis, Ingeniera Hidráulica y militante del Frente Territorial Salvador Herrera (FOSH-CTAA), explicó: “Desde la Coordinadora la Ciudad Somos Quienes la Habitamos, hemos organizado esta extensa jornada de lucha para recuperar el borde costero, la costanera y además transformarlo en un parque público “Parque Nuestro Rio”. Queremos recuperar el borde costero para poder, entre otras cosas, mitigar las inundaciones, el aumento de la temperatura y eventuales ascensos del nivel del río. Recuperar el borde costero es fundamental porque no podemos consolidar una nueva fractura urbana. El modelo de concentración de tierras que Macri y Larreta nos proponen desde hace trece años nos ha llevado aquí, a esta emergencia ambiental, climática y habitacional en la Ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico del país. ¡No a la venta de Costa Salguero, si al Parque Nuestro Rio!”

Pablo Spataro, secretario General de la CTAA Capital, también estuvo presente en la Caravana, y dijo: “Para terminar con la ciudad de los negocios y la especulación financiera hace falta construir conciencia y fuerza organizada y hoy es una muestra de eso. Durante la semana pasada hemos visto como a quienes no tenían tierras se los ha acusado de usurpadores, pero los verdaderos usurpadores son los que llevan a cabo estos negocios inmobiliarios y privados, quienes se quieren apropiar de lo que es un patrimonio para todas y todos los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires. Hoy desde la CTAA Capital, con un conjunto de organizaciones que habitan esta Ciudad, estamos para decir ¡Basta del negocio inmobiliario y sí a la Costanera para todos y todas!”

Por su parte, Jonatan Valdiviezo del Observatorio de Derecho a la Ciudad, describió la actividad como “un verdadero acto de recuperación de la soberanía política de la ciudadanía porteña y un ejercicio de Democracia Participativa para frenar el plan sistemático de privatización de tierras públicas y en defensa de la Costanera, que es uno de los principales bienes comunes de la Ciudad y no debe quedar supeditada a intereses inmobiliario o electorales. La costanera, como espacio libre, gratuito y verde, es parte de la esencia de la ciudad y de la sociedad porteña que quiere recuperar su cultura ribereña y no quiere perder su derecho al río y al horizonte”.

En un domingo que acompañó con mucho sol, se realizó un abrazo simbólico en Costa Salguero y se recorrió todo el predio perimetralmente hasta llegar a la ribera del Río de la Plata. En un ejercicio sin antecedentes de la Democracia Participativa, la ciudadanía porteña realizó un posicionamiento muy claro solicitando que la totalidad del predio se transforme en un gran espacio verde. Para finalizar la jornada, se realizó un acto que bautizó a este futuro parque como Parque Público “Nuestro Río”.