Cuidar y maximizar las ganancias de las empresas y evitar que el Estado se haga cargo de sus obligaciones de control (y también las de empleador) es, sin duda, una POLITICA DE ESTADO, que han sostenido sistemáticamente MENEN, DUHALDE, DE LA RUA, KIRCHNER, FERNANDEZ, MACRI, desde la promulgación de la Ley de Riesgos del Trabajo 24557 en el año 1995. Dicha política está basada en el gran negocio de la enfermedad, que en el mundo del trabajo se expresa en garantizar que los trabajadores se sigan enfermando mientras trabajan, a esta altura no se puede sostener que es un efecto no buscado.
* Por Beto Galeano ATE CDN