ACTA dialogó con Rodolfo Córdoba, presidente de la Junta Electoral que fiscalizará las próximas elecciones de la Central que tendrán lugar el 29 de mayo, a 45 años del «Cordobazo». El dato sobresaliente es la confirmación de que el actual secretario General de la CTA, Pablo Micheli, va por la reelección junto a Ricardo Peidro y José Rigane como sus secretarios adjuntos. A nivel nacional, además de la lista 1 Germán Abdala de Micheli, presentaron listas dirigentes sindicales ligados al Partido Obrero y el Nuevo MAS.
-¿Cuáles son las características centrales de esta elección en cuanto a cifras?
-Listas a nivel nacional son 3: La lista 3 del Partido Obrero, cuya candidata a secretaria general es María Elena Molina; la 5, del Nuevo Mas (Luis Alberto Donadío es el candidato a secretario general); y la 1 Germán Abdala, de Pablo Micheli. Tenemos 248 comisiones ejecutivas. Va a haber elecciones en todo el país, con 4.600 mesas habilitadas para votar y los candidatos que se van a elegir son 18.922 en todo el país. Estos candidatos van a estar repartidos en 400 listas. Habilitados para sufragar en el padrón tenemos 1.089.000 trabajadores.
En las 4.600 mesas va a haber un presidente de mesa designado por la Junta Electoral y después cada una de las listas pone los fiscales que desee. Toda lista que esté oficializada tiene derecho a tener un fiscal en cada una de las mesas.
-¿Qué condición hace falta para participar en la elección?
Estar en el padrón y concurrir con el DNI.
-¿Cuál va a ser el horario de votación?
El horario que está establecido es desde las 6 de la mañana hasta las 18.
-¿Qué espera usted, a título personal, que surja de la nueva conducción de la CTA? ¿Cual debería ser, a su juicio, la nueva agenda?
A título personal yo espero que haya una renovación real: en las listas se ven muchos compañeros nuevos, más allá que tradicionalmente por ahí está conducida por los mismos compañeros pero en la conformación de las listas hay compañeros nuevos. Espero que empiece ese tránsito de renovación de nuevos compañeros y como gestión para el próximo período a mí me parece que hay todavía una tarea pendiente que es la elección de delegados reales.
Una institución como la Central, con casi un millón 100 mil afiliados, sin delegados es muy difícil poder escuchar a los que uno intenta representar. Indudablemente es necesario que tengamos delegados. En los próximos 4 años para mí la CTA tiene que tener 100 mil delegados en el país que puedan acercar las necesidades de cada uno de los compañeros de cada uno de los territorios a cada una de las conducciones.
-Y a nivel nacional, es mucho el esfuerzo institucional y militante que se está llevando a cabo para garantizar la elección
Hay mucha gente trabajando en esta elección. Hay que tener en cuenta que esta elección es equivalente a una provincia mediana como Santa Fe o Córdoba. Es una elección muy grande. Requiere un esfuerzo enorme para el cual hay una infinidad de compañeros que están trabajando. Sería imposible llevarla a cabo sin la cantidad de compañeros de todo el país (hay 250 compañeros trabajando en todo el país como delegados electorales) y hay mucha militancia trabajando que no son candidatos.