En el día de ayer falleció Marina, compañera y gran referenta, con sus hijos, del Torito Pulenta que de Comedor fue alojando a lo que hoy es el Centro Comunitario que acobija además al Bachillerato Popular Salvador Herrera, a la Olla Rebelde y a la Juegoteca. A continuación se comparten unas palabras que escribieron las y los compañeros del Frente Salvador Herrera.
A partir de hoy, así vamos a recordarte. Agradecidxs por abrir tu corazón y espacio a otros sueños.
Como otras tantas pequeñas gigantes, comenzaste hace muchos años con algunos paquetes de fideos, salsa de tomate, un kilo de carne, una olla, pero sobre todo, mucho amor. En un rancho humilde, pequeño, con piso de barro, que fue convirtiéndose en un hermoso lugar por medio de la lucha y la organización tuya, tu familia y el barrio.
Allí llegó “el bachi” en 2013, nos abriste las puertas de tu casa para multiplicar. Fuimos más corazones, más mesas y comidas compartidas, más familias, cientos y cientas que recibieron el cobijo de cada vez más abrazos.
La organización nos fue convirtiendo en un centro comunitario, que no sin pocas dificultades fue abrigando muchos otros sueños, estudiantes, niñxs. El Torito Pulenta tomó las dimensiones de tu enorme corazón y logramos abrigar de lunes a lunes a todo un barrio.
Gracias Marina, por abrir tu corazón y tu espacio a nuestros sueños. Por tu fuerza incansable, por tu generosidad. Seguramente muchxs, en estos días, hablarán de tus pequeños grandes gestos.
Vamos a cuidar tu comedor, tu casa, con la misma fuerza que vos lo hiciste.
Desde el Frente Salvador Herrera acompañamos en este momento en un gran abrazo a sus hijxs, familia y seres queridxs.
Hasta la ternura siempre, Marina.