Ante los dichos discriminatorios de la Ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, el Frente de Bachilleratos Populares de la CTAA Capital elaboró el siguiente posicionamiento al que adhiere toda la regional
En la nota brindada por Soledad Acuña, Ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, en un programa de Radio Rivadavia del 18/01/22 afirmó que “ya es tarde para recuperar en las escuelas a les niñes que no pudieron asistir durante la pandemia, ya que se perdieron en los pasillos de las villas, cayeron en las actividades del narcotráfico o se pusieron a trabajar.”
Si es tarde, es porque la Ministra tiene la decisión política de abandonarles a su suerte. Cuando afirma semejante incapacidad, cae de maduro su impericia o su negligencia. El abandono del intento por restituir los derechos educativos a les niñes más afectades por la pandemia merece un enérgico repudio de toda la comunidad, no sólo de la educativa. Como otras negligencias de la Ministra, cabe recordar la negativa a retomar la entrega de notebooks para primaria o el desmantelamiento de la conectividad libre que rodeaba las escuelas, de modo que les estudiantes dejaron de acceder gratuitamente al servicio de internet. Nunca es tarde Acuña.
Parece que la Ministra no conoce siquiera dónde está enclavado el edificio de su propio Ministerio: en el corazón de los pasillos de la villa. Porque afirmar la pérdida de les niñes en los pasillos de sus barriadas, donde todos los días transitan pasando sus infancias junto a sus familias y vecines, es reducir el barrio a sus lugares delictivos, ignorando que éstos son una parte menor del conjunto de su geografía, de una barriada obrera y trabajadora.
De esta manera, la Ministra estigmatiza y desconoce a todo el barrio, a toda la villa, donde en las casas de sus pasillos existen innumerables espacios de solidaridad: comedores, centros culturales, espacios de niñez, merenderos, centros de salud, escuelas, bachilleratos populares, parroquias, como así también infinidad de actividades económicas donde les vecines trabajadores desarrollan día a día sus quehaceres, como en cualquier otro barrio de la ciudad. Nunca es tarde Acuña.
Si las infancias cayeran en las redes del narcotráfico, ¿no sería acaso por incapacidad, responsabilidad, complicidad o decisión de quienes gobiernan la ciudad desde el 2007? Nunca es tarde Acuña.
Y si tuvieron que dejar sus estudios para salir a trabajar, ¿no será acaso por la carencia de políticas públicas para que sus familias puedan tener ocupaciones con ingresos que les permitan satisfacer sus necesidades?
Los bachilleratos populares conocemos muy bien la situación cada vez más extendida de les jóvenes y adultes que no terminaron sus estudios porque tuvieron que salir a parar la olla, son nuestros sujetos escolares. Nunca es tarde Acuña.
Si la Ministra entiende que eso ya está ocurriendo en las escuelas primarias (que no es ninguna novedad sino para ella misma) en lugar de renunciar a garantizar el derecho a la educación a les niñes, debería implementar soluciones. Pero parece que la decisión política ya la ha tomado: “es muy tarde” dice. Frente a esto nosotres te decimos, no, Nunca es tarde Acuña.