De Ushuaia a La Quiaca no hubo más que festejos esta mañana cuando se conoció que nuestro derecho a decidir tenía 131 votos a favor y 117 en contra. Y es que la lucha porque no haya ninguna mujer ni niña más muerta por abortos clandestinos es una pelea que la CTA Autónoma viene dando desde los años ’90.
Tras 20 horas de debate y con 131 votos a favor y 117 en contra, Diputados le dio media sanción al proyecto de legalización del aborto y a la Ley de los 1000 días. Ahora se espera la votación en Senadores que se prevé para el 22 de diciembre.
A diferencia de 2018, cuando Diputados aprobó el proyecto con 129 votos positivos, 125 negativos y una sola abstención, esta vez y gracias a la lucha en las calles, la brecha se agrandó.
“Para muchas compañeras de mi edad, la lucha por nuestro derecho a decidir ha sido clave para descubrir y abrazar el feminismo y la militancia. Estar acá celebrando esta conquista, aunque aún falte Senadorxs, es de una alegría y felicidad inmensa”, dijo una de las jóvenes que pasó la noche frente al Congreso.
Afuera del recinto, en el Congreso, el clima fue de alegría y festejo durante toda la noche: hubo música, cantos, bailes, y hasta rayuela. También hubo tiempo para reflexionar sobre los caminos de esta lucha conjunta, difícil pero que está dando sus frutos y para contarnos las experiencias traumáticas de quienes sufrieron abortos en soledad. Si la ley termina aprobándose en Senadores, ya no será así y las decisiones de interrumpir un embarazo no deseado serán acompañadas, respetadas y cuidadas.
«Venimos de una generación en la que el aborto era algo sucio que teníamos que esconder las mujeres y la posibilidad de haber construido a lo largo de todos estos años con el feminismo y con nuestra propia Central que en el ’99 ya decidió la lucha por la legalización, nos abre para nosotras mismas, para nuestras hijas, nietas y todas las que vienen la posibilidad de elegir si queremos o no gestar, decirlo, transitarlo, poder gozar de nuestra sexualidad libremente, con placer y sin que el destino sea el embarazo, nos permite disfrutar nuestras maternidades cuando son deseadas. Además que sea ley logrará que no haya más mujeres y niñas muertas por abortos clandestinos», dijo Silvia León, con la emoción en la voz.
«Es un día histórico, fuimos protagonistas de la marea verde de 2018 también. Es la gran deuda de la democracia con las cuerpas gestantes, creemos que ya es tiempo, que fueron muchos los avances que hemos tenido en el movimiento feminista que nos tuvo a las mujeres sindicalistas como una parte importante, que hemos venido tejiendo una unidad para poder conquistar nuevos derechos, que las mujeres dejen de ser penalizadas por ejercer un derecho sobre sus cuerpos, que podamos decidir no continuar con un embarazo no deseado, que haya educación sexual en todas las escuelas, que no se nieguen por objeción de conciencia», dijo Claudia Baigorria, secretaria general adjunta de la cta a que viajó especialmente desde Santa Fe para la vigilia.
«Para mí es una gran emoción, tengo sentimientos muy fuertes internos de pasión, de encontrarnos, de estar juntas en la calle y después de tantos años estamos ahí de tener un derecho fundamental a la autonomía y a la decisión de las mujeres con eso con lo que el patriarcado nos estableció como mandato que es la maternidad”, dijo Viviana García, Secretaria de Cultura de la CTA Autónoma.
“Ya es tiempo de que el aborto sea legal en Argentina. Sabemos que el aborto salió de la clandestinidad en términos sociales, que Argentina está preparada para que sea legal, seguro y gratuito. Es tiempo que el aborto sea legal, sobre todo por las mujeres más vulnerables, pero por todas, porque no nos merecemos la clandestinidad», celebró Clarisa Gambera, sectretaria de Géneros de CTA A Capital, este triunfo de la lucha organizada.
Fotos: Fabián Piedras
Fuente: ACTA | www.agenciacta.org