Hace una semana compañeras cooperativistas organizadas en el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) en la Villa 1-11-14, fueron agredidas por un patota que responde a Estela Tirado, puntera del PRO en ese barrio. Las trabajadoras integran una cuadrilla de recolección de residuos en el Bajo Flores y fueron amenazadas y golpeadas, con la intención de quitarles sus puestos de trabajo.
* Por Valeria Garay
“Nosotros estamos trabajando hace cinco años con un recorrido y ellos con otro. Hasta que aparecieron el miércoles pasado diciéndonos que no podemos trabajar en nuestros puestos. Les respondimos paíificamente, pero nos empezaron a gritar. Los vecinos, que ya nos conocen, nos preguntaban quiénes eran los patoteros. Nosotras somos una cooperativa de todas mujeres y ellos eran puro hombres, no nos dejaron pasar y se adueñaron de nuestro recorrido. Al día siguiente, vino la puntera a preguntarnos qué hacíamos ahí, que no teníamos que estar ahí, que ese era su recorrido. Eran como 50 hombres, yo hablé pacíficamente y nos dijeron que nos fuéramos”, relató Alicia, cooperativista y militante del FOL.
“El viernes volvimos a trabajar y aparecieron más de 60 hombres grandotes y nos dijeron directamente ‘salgan de acá’. Los vecinos salieron a defendernos y uno de los hombres le pegó a una de mis compañeras y apuntaron a otra. Estela Tirado todo el tiempo nos amenaza y no nos deja trabajar. Todas las compañeras lo pasamos muy feo, nosotras trabajamos puramente mujeres acá, solo 3 o 4 varones trabajan.”, agregó la compañera.
De esta manera, la puntera del PRO y su
patota, pretende desplazar a las cooperativas que trabajan en los
barrios populares de la Ciudad, en este caso, limpiando las calles de
la 1-11-14. Labor ganada por el esfuerzo y la organización popular,
con amplio reconocimiento de las y los vecinos del barrio.
“El pasado lunes sacamos un comunicado diciendo que no queremos más violencia y que queremos trabajar en paz. Ese mismo día salimos a la marcha y ellos estaban en el camino y no nos dejaron pasar. Mis referentes llamaron a los funcionarios y entraron en un diálogo con el Gobierno. Esta patota nos quitó 7 recorridos de puestos de trabajo, nos quitaron la manzana 2 y la manzana 7. Ahora estamos trabajando en una manzana más tranquila, acompañadas de más compañeros que nos están apoyando, pero los de la patota vienen a espiarnos”, explicó Alicia.
Quien además agregó: “Si nos siguen molestando vamos a tener que hacer otra marcha o tomar otra medida, porque es la tercera vez que nos amenazan y nos patotean. Ya vinieron a la puerta de nuestro comedor, nos tiraron con botellas y piedras, nos persiguieron y nos amenazaron con quemar nuestras casas. Esto es una persecución política, nos aprietan a nosotros para conseguir sus puestos de laburo porque a ellos se les acaba el contrato este mes y no saben a dónde meter a su gente, por sus malos antecedentes. Ellos nos aprietan a nosotros, pero esa no es la forma de conseguir las cosas. Por eso nosotros necesitamos las garantías para poder trabajar. Cualquier cosa que les saque el Gobierno a ellos, después van a venir otra vez a apretarnos. Entonces nosotros tenes miedo de trabajar acá. Arriesgamos nuestras vidas para ganarnos el pan.”
Por todo esto desde el FOL exigen a los
funcionarios del Gobierno de la Ciudad que no sean cómplices de esta
mafia, que intervengan y se hagan cargo de la actividad de una
puntera a la que le están dando trabajo.