El ex presidente y socio fundador de la UST (Unión Solidaria de Trabajadores) habló en ‘Estación Central’ (Radio Sur, FM 88.3) -el programa radial de la CTA Capital- sobre la situación actual de las empresas recuperadas por sus trabajadores. Aquí se comparte un fragmente de su entrevista.
En los años 2001 y 2002 se vio con fuerza el fenómeno de los trabajadores que recuperaban sus fuentes de trabajo y resistían a las políticas neoliberales de exclusión, desempleo y quiebras fraudulentas. Ese sujeto social y colectivo hoy sigue más que nunca en vigencia y uno de esos ejemplos es la Unión Solidaria de Trabajadores (UST), la cooperativa de trabajo surgida en el 2004, cuyos integrantes en su mayoría son ex trabajadores de Techint, grupo empresario que decidió retirarse.
Actualmente esta cooperativa de trabajo es un ejemplo, ellos realizan tareas de parquización, forestación, tienen un polideportivo, trabajo territorial y comunitario, un bachillerato y un programa de radio. El compañero Mario Barrios, además de ser fundador y ex presidente de la UST es el secretario General de ANTA, que es la Asociación Nacional de Trabajadores Autogestionados, creada en el 2005.
– Mario ¿Han aumentado las recuperaciones en los últimos años? Porque de esto no se habla mucho, pero existen estas experiencias y más ahora que hay nuevas quiebras.
– Sí, es permanente el crecimiento de las empresas recuperadas. En este último año sin ir más lejos se han recuperado 8 o 9 experiencias nuevas. La realidad concreta es que se siguen dando este tipo de quiebras fraudulentas y seguimos a 10 o 12 años del máximo pico en el tema de la recuperación de empresas, trabajando por una ley de aplicación nacional.
Sin ir más lejos, ayer (por el martes 14) los compañeros de la CTA viajaron a Rosario donde terminaba de quebrar una empresa textil y la semana que viene estaremos yendo con los compañeros para charlar y contarles cómo es la cuestión de las empresas recuperadas. Algo que es tan desconocido para un trabajador bajo relación de dependencia y que toda su vida ha trabajado dentro de la formalidad.
– ¿Qué importancia tiene que hoy cuando una empresa quiebra determinados laburantes empiecen a naturalizar esta opción de poder vivir sin patrones?
– Yo creo que es una perspectiva que no se daba y hoy es una cosa instantánea, es una nueva herramienta de lucha de la clase. Nosotros en todo lo que podemos ayudamos, acompañamos, contamos la experiencia, tratamos de legalizar permanente, porque la legitimidad que tienen las empresas recuperadas es indiscutible y lo que nos falta es avanzar en la legalidad que nosotros entendemos debe darse. Es una realidad concreta y debe existir una legislación que contemple estos nuevos sujetos sociales. Tratamos de encontrar la unidad conceptual de lo que decimos cuando decimos Trabajadores Sin Patrón, para buscar una ley que nos contenga a todos.