Este lunes 19 de mayo habrá elecciones generales en el Sindicato de Trabajadores Inmobiliarios, el primer gremio de la historia que nuclea a trabajadores y trabajadoras del sector. ACTA dialogó con Marcelo Ghio, candidato a secretario general. Los comicios tendrán lugar de 9 a 21 en la sede de CTA Capital (Independencia 766 de la Ciudad de Buenos Aires).
-¿Cómo nació el sindicato?
El sindicato tiene dos años y medio, desde que empezamos el trámite en el Ministerio de Trabajo y nos incorporamos a la CTA. De ahí en más empezó nuestro trabajo y muchas veces tuvimos algunos cruces con la Cámara Inmobiliaria porque ésta nos pedía que para que pudieramos actuar, ellos necesitaban algún comprobante, que la sola formación del sindicato no bastaba, en aquella época los trabajadores que contaban con alguna formalidad estaban en Comercio. Eso hizo que nos abocáramos de lleno a hacer el trámite en el Ministerio de Trabajo que concluye con el resultado de que el 28 de octubre del 2013, bajo la resolución 1066, el ministro de Trabajo Carlos Tomada firmara la inscripción gremial. A partir de ahí el Ministerio exigió algunos requisitos como la publicación de los edictos del estatuto y llamar a elecciones para autoridades definitivas.
Este lunes 19 concretaremos este que es el último paso en el trámite de la inscripción gremial. La elección de los cargos de la comisión directiva y de la junta revisora de cuentas que van a tener un mandato por 4 años ya en forma definitiva.
-¿Quiénes conforman la lista?
Nosotros la denominamos la lista verde, la lista 1, yo voy como secretario General, Carlos Rico como secretario Adjunto y otros compañeros en los demás cargos.
¿Quiénes están en condiciones de votar?
Todos los compañeros que estén afiliados y estén en el padrón, el lunes 19 en un horario amplio, desde las 9 de la mañana a las 21, con la sola presentación del DNI, los compañeros podrán votar. Terminado este paso, con el resultado de las elecciones, el Ministerio expenderá un certificado que nos habilitará para presentarnos ante las autoridades de la Cámara Inmobiliaria y comenzar a gestionar el pedido de los compañeros dentro del sector.
Por otro lado, en paralelo, el sector está pasando la peor crisis de la historia por el cepo del dólar y la política monetaria que está llevando adelante este Gobierno. El empresario inmobiliario siempre quiere ganar, nunca quiere perder y la variable de ajuste somos siempre los trabajadores. Cuando le va bien están todos contentos pero cuando le va mal lo primero que hacen es recortar en contra de los trabajadores. Nosotros tenemos datos del Colegio Nacional de Martilleros que la baja en la matrícula fue muy poca, o sea que casi nadie ha cerrado su inmobiliaria pero sí han despedido trabajadores o han cerrado sucursales, pero las casas matrices están funcionando todas.
Esos datos nos demuestran que tenemos una tarea muy ardua por delante, sobre todo por la informalidad que hay en el sector: hay gente que está totalmente informal y gente que está parcialmente informatizada y gran parte del sueldo y las comisiones no están formalizadas. Tenemos un trabajo muy arduo, de base, trabajando inmobiliaria por inmobiliaria.
Luego de las elecciones y después del Mundial nuestro primer paso es tratar de hacer elecciones de delegados en los puestos de trabajo, es nuestro más amplio desafío y hacer una campaña importante de afiliación.
-¿Cuántos compañeros trabajan en el sector?
No hay ningún padrón disponible pero nosotros tenemos una idea de que son cerca de 6 mil solamente en Capital Federal. De lo que sí tenemos el padrón es de los martilleros: hay 6 mil martilleros matriculados, de ellos hay 4 mil que están funcionando como inmobiliarias y nosotros calculamos un empleado y medio por inmobiliaria y hay inmobiliarias que tienen más de 200 empleados como Toribio Achaval, pero calculamos 6 mil empleados en Capital Federal. Entre Capital y gran Buenos Aires tiene que haber unos 10 mil empleados sin contar toda la gente que hace guardias los fines de semana que es gente que trabaja medio tiempo y que está completamente informatizada. Además es un sector que nunca fue atravesado por ninguna política sindical, nunca tuvo un sindicato. La mayoría de las inmobiliarias son de menos de 7 empleados por eso está nueva ley que está por salir, de blanqueo, sería bárbara porque ahí se les acabaría la excusa de ponernos en blanco porque tendrías las cargas sociales subsidiadas, pero vamos a ver qué dice la letra chica de la ley. La mayoría de los casos son pocos empleados trabajando muy cerca del empleador.