Productores hortícolas se movilizaron ayer a Plaza de Mayo para ser atendidos por el presidente Macri a fin de relatarle la crítica situación del sector. En esta particular medida, regalaron 10 mil kilos de fruta a la gente que se acercó. La Secretaría de Juventud de la CTA Autónoma acompañó la medida.
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Raúl Rajneri, Secretario de Juventud de la CTA Autónoma contó que: «La situación es catastrófica, van a la quiebra total. Por ejemplo hoy el precio que cobra el productor por el kilo de manzanas es de 3$ cuando en la góndola vemos a 28, 30 o 40 pesos. Las intermediarias, los grandes supermercados se llevan más del 851% cuando, para colmo el costo de producción (lo que le sale al productor) es de 4,50$; tienen un déficit de 1,50$. Eso es en la manzana, lo que respecta a la pera es una situación muy parecida e incluso peor».
Los productores reclaman por algo que se denomina precio sostén. Hoy están en riesgo 2000 productores en situación de quiebra total, y peligran 60.000 puestos de trabajo entre obreros rurales y demás. «Fue muy importante, hubo mucha solidaridad de la gente. Lo que también se vio, fue que viene creciendo de la mano del ajuste del gobierno nacional la situación de pobreza y hambre que hizo que supere toda expectativa la cantidad de gente que ha ido a buscar fruta, por las necesidades que hay».
Distintos sectores agrarios en todo el país están organizando medidas de fuerza y de lucha que pueden empalmar en una gran marcha federal, con lo cual no se descarta que estos sectores empalmen (puede ser) para fines de septiembre.
«Esto tiene que ver también con la situación de las economías regionales que se ha recrudecido, pero por ejemplo ellos lo que dicen es que los grandes exportadores han mejorado su situación porque efectivamente les sacaron las retenciones, les sacaron las retenciones en los puertos y las regalías con lo cual para los de «arriba» ha mejorado la situación pero los de «abajo» siguen igual o peor que con el kirchnerismo», contó Rajneri.
Finalmente analizó: «Esto es una muestra concreta de cómo se va concentrando cada vez más la riqueza. Se llevan las ganancias los que no producen y los que producen la tierra, los que trabajan con la fruta y con los alimentos son los más golpeados. Pero los obreros rurales que están siendo despedidos se sienten peor».