Daniel Sánchez, delegado de ATE; Rodolfo Kempf, trabajador de la Comisión Nacional de Energía Atómica y Dirigente Nacional de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTA), y Hebe Durán, de la Asociación de Profesionales de la Comisión Nacional de la Energía Atómica y la Actividad Nuclear, fueron entrevistados ayer por la periodista Rosario Lufrano, en el programa Hay otra historia, que emite el Canal de noticias Crónica TV. Allí los compañeros pudieron contar por qué peligra el plan nuclear en Argentina.
– Un país que no apuesta a la investigación, que no apuesta a sus profesionales y a su educación, dificilmente pueda salir del pozo en que se encuentra, comentó Rosario Lufrano, para dar inicio a la entrevista.
– Kempf: “Es una situación grave la que está pasando el sector de tecnología nuclear, fundamentalmente se están desmantelando gran parte de nuestros cuadros y planteles técnicos asociados, con la inminente medida que toma el Gobierno posterior al primer acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que fue reafirmado en la reunión del G20, de cancelar un acuerdo que era favorable desde el punto de vista tecnológico para la Argentina. Este era Atucha III, con una tecnología que la Argentina maneja en la Central Nuclear Embalse, que ahora está comenzando una tarea fundamental y crucial que ejerció en el gobierno anterior, que fue el reentubado. Bueno, esa tecnología que manejamos, el Gobierno decidió cancelar ese tipo de compra, bajo presión del Fondo Monetario, y que fue reafirmado en el G20.
– Una de las condiciones de Trump para venir a la Argentina era dar por la borda con algunos proyectos que se tenían con China y con Rusia. El veto de Trump pesó más y hubo varios proyectos descartados, entre ellos Atucha III.
– Daniel: “La CONEA tiene más de 60 años de historia, hay una gran calidad de operadores y de tecnólogos que pudieron desarrollar la tecnología nuclear Candú. Claramente hay una intención del FMI de trabar este acuerdo, pero nosotros desde el área nuclear levantamos también el rol de nuestros propios técnicos, nuestros propios profesionales que pudieron desarrollar esa tecnología en el país. Ahora estamos en un momento difícil, porque si se lleva adelante lo que quiere el Gobierno vamos a enfrentar una pila de despidos y un desastre en varias empresas que son muy importantes en el área nuclear, por ejemplo la operadora de las Centrales Nucleares, que se llama NASA, ahí ya hubo 200 despidos y quieren despedir a más. En la Central Nuclear de Embalse quieren despedir a 200 trabajadores y trabajadoras más y en la Planta Industrial de Agua Pesada, sino se compra la tecnología que maneja la Argentina, van a desarmar esa fábrica y van a despedir a 400 compañeros y compañeras ahí.”
– Más allá de lo que contamos, el Gobierno dice que va a hacer Atucha III. ¿Ustedes tienen realmente la información correcta?
– Hebe: “En principio, lo que ellos suspendieron es la cuarta central. La CONEA desde los años 70 que ha decidido optar por este tipo de tecnología, la Candú, por lo tanto tenemos todas las capacidades científicas y tecnológicas para desarrolarla. En el acuerdo con los chinos estaba esta cuarta central, que iba a implicar un beneficio para el desarrollo, porque iba a tener mucha mano de obra argentina, de tecnólogos argentinos y con una tecnología que nosotros conocemos. En ese acuerdo también había una quinta central de tecnología china, el mismo interesaba a ambas partes. El acuerdo inicial era la construcción de dos centrales, lo primero que suspende el Gobierno es la cuarta central, inmediatamente luego del acuerdo con el FMI.
Rodolfo: “La planta industrial de agua pesada es una planta muy grande, operada por 400 trabajadores, este Gobierno ha aplicado un programa de retiros voluntarios en el cual gran cantidad de compañeros y compañeras han entrado en desánimo, han tomado el retiro voluntario y para fin de año o para marzo probablemente esa planta esté cerrada. Es una planta única en el mundo, la planta de agua pesada en el mundo de mayor refinamiento, es un elemento estratégico, el agua pesada no se vende en el mercado internacional, es como que se alquila.
También fue parte de los acuerdos de la Cancillería Nuclear que tiene Donald Trump en el G20, ir al desmonte de esa planta industrial. Y si es como dice el Gobierno, porque hubo una nota en Ambito Financiero la semana pasada, prometiendo que se iba a iniciar esa Atucha III, bueno, en ese caso también tendríamos un pedido de trabajo para la planta industrial de agua pesada, que son 200 toneladas al año, pero lo que si está en marcha es un retiro voluntario.
Argentina es exportadora con calidad nuclear, de los tubos de presión de la Central Candú de Embalse, los ha exportado a la India, lo está haciendo, y para ese área en la empresa metalmecánica Conuar no hay ningún pedido de trabajo. Entonces, creemos que es una medida de operación de prensa del Gobierno para que nosotros bajemos la guardia. Y nosotros tenemos que mantener la guardia alta porque tenemos 16 compañeros desaparecidos que han peleado por este tipo de tecnología y que pueden quedar 60 años de trabajdores calificados, con sus conocimientos acumulados, en banda.”
Hebe: “Es importante remarcar que la planta de agua pesada está parada, están ofreciendo retiros voluntarios y los trabajadores no están cobrando los sueldos.”
“Esta es la realidad. Este país necesita que esto funcione si queremos salir de la situación en la que nos encontramos. No es alrevés, no se achica acá, a la Argentina. Esto es soberanía, identidad, progreso.”, concluyó Lufrano en el cierre de la entrevista.