Desde la Secretaría de Derechos Humanos de la CTAA Capital expresamos nuestro más enérgico repudio ante los intentos -por parte de la Policía Bonaerense- de poner en jaque a las instituciones democráticas, con maniobras desestabilizadoras y coercitivas sobre el Poder Ejecutivo de la Provincia de Buenos Aires.
Como trabajadores y trabajadoras que somos, podemos comprender un reclamo por recomposición salarial y mejores condiciones de trabajo, pero éste no es el caso, ya que advertimos con enorme preocupación que más allá de lo que se plantea como un reclamo laboral, lo que ocurre en realidad es una insubordinación y una extorsión por parte de la Policía Bonaerense hacia el Gobierno de la Provincia, para imponer las condiciones de la fuerza policial al poder civil.
En este sentido, es muy
esclarecedor que el último punto de los 14 reclamos sea “Basta de
represalias (sumarios, arrestos, desafectaciones y traslados como
medidas de disciplinamiento)”.
Es decir, que las mismas fuerzas
sobre las que pesan acusaciones de todo tipo, como ser el manejo y
control del delito (zonas liberadas para robar, cobros regulares para
“dejar trabajar” a traficantes, irregularidades en el manejo de
las cajas, armado de causas, represión, detenciones ilegales y
arbitrarias, abusos policiales, e incluso causas de gatillo fácil y
Desapariciones Forzadas de Personas -cuyo exponente más reciente fue
Facundo Astudillo Castro- están exigiendo, con este levantamiento,
que no haya sanciones para sus integrantes.
No es casual que luego que el
Gobierno planteara ciertas acciones como ser la estatización de
Vicentin o el impuesto a las grandes fortunas, se haya pasado de los
aplausos a les trabajadores esenciales y de la Salud, a los
caceroleos y marchas en plena pandemia sin distanciamiento ni ninguna
medida de precaución. Decimos que no es casual porque sabemos ha
sido incentivado y fogoneado por las corporaciones de la
comunicación, alentadas por el poder real que es el económico,
utilizando a la ciudadanía y a los manifestantes como si éstos
fueran los perjudicados de esas medidas.
Esas mismas
corporaciones de comunicación alentadas por el poder económico,
fueron las que solapadamente anunciaron y mediatizaron esta
insubordinación desde días anteriores a que se produjeran. Basta
ver las declaraciones de voceros como Eduardo Duhalde o Florencia
Arietto, entre otros, quienes “vaticinaron” un malestar en las
fuerzas, un estallido social y hasta un golpe militar. En este mismo
sentido, entendemos que también se inscribe el comunicado del
Ejército en homenaje al Operativo Independencia, piedra fundacional
de los crímenes de lesa humanidad en Tucumán en 1975 -que sería
laboratorio de pruebas para concretar durante la dictadura militar de
1976-, desconociendo el Estado de Derecho y consecuentemente su
responsabilidad por perpetrar crímenes al abrigo del Estado, así
como las reuniones de la derecha a nivel continental y un
inexplicable viaje de un ex mandatario argentino a Paraguay.
Ante
este cuadro ratificamos nuestro compromiso con la democracia y
repudiamos enérgicamente estas acciones que tienden a condicionarla
o jaquearla.
Confiamos en los valores
democráticos de la inmensa mayoría de nuestro Pueblo, porque
infinidad de veces hemos demostrado estar a la altura. Basta recordar
que somos el único país que, con las deficiencias que siempre hemos
marcado, logró sentar en el banquillo de los acusados a los
genocidas y condenarlos por delitos de lesa humanidad.
Entendemos más necesaria que nunca
una Profundización del Control civil sobre todas las fuerzas de
seguridad; la Formación en valores democráticos para que funcione
dentro del marco de la ley y la Democratización de la institución
policial.
Por último, ratificamos nuestro
compromiso, como Central de Trabajadores, con las decisiones
soberanas de su Pueblo y de la clase trabajadora y es por ello que no
aceptaremos de ninguna manera este tipo de acciones.
Nos encontrarán siempre defendiendo la Democracia y sus Instituciones, oponiéndonos a cualquier intento desestabilizador en la provincia de Buenos Aires y en cualquier otro punto de nuestra Patria, porque estamos comprometidos para siempre con el NUNCA MAS Golpes de Estado Nacionales, Provinciales o Municipales.
Nunca Más Es Nunca Más