Una delegación de la CTAA Capital participó de la séptima Marcha por la Soberanía a Lago Escondido, provincia de Río Negro, que crece año tras año y ya tiene peso específico en la agenda de distintas organizaciones.
El Capitán Oscar Verón, Secretario General de la Junta Interna de ATE Vías Navegables y Secretario de Relaciones Institucionales de la Regional Este de la CTAA Capital, viajó a la provincia patagónica como integrante de la mesa coordinadora de la séptima edición de la Marcha por la soberanía a Lago Escondido, que se desarrolló durante los últimos días del mes de enero y los primeros de febrero y viene sumando voluntades, militancia y organizaciones con el correr de los años.
Para Verón, “es indudable que la convocatoria a rescatar la soberanía superó las expectativas gracias a las conferencias de prensa y a los distintos hechos a los que se sumaron compañeros y compañeras de ambas CTA (Autónoma y de los Trabajadores), movimientos sociales y populares, la CGT a través de Pablo Moyano y la Corriente Federal que nuclea a otros sindicatos”.
El periplo comenzó el 27 de enero con una conferencia de prensa en la que participaron agrupaciones que respaldan esta marcha iniciada por Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (FIPCA), presidida por Julio César Urien, quien forma parte de la Mesa Coordinadora por la soberanía del Paraná y el Canal Magdalena, junto con la CTAA Capital y otras organizaciones.
En esa conferencia de prensa se anunció que el día 30 comenzaría la marcha hacia el camino Tacuifí (con la entrada cerrada, ya no por tranqueras, sino portones e hileras de policía armada) para dejar copia de la resolución judicial que apelara la Gobernadora de la Provincia de Río Negro, Arabela Carreras, cuyo accionar apoya la ocupación ilegal del Lago Escondido y el resto de ese territorio por parte de Joe Lewis.
En paralelo, el 28 de enero, la columna Juana Azurduy había iniciado una travesía de cinco días por el camino de montaña para llegar al Lago Escondido, donde acampó durante dos noches frente a la mansión de Lewis y resultó asediada y agredida por su patota. Entre las 62 personas que integraron la columna, estaban Jorge Rachid, el Padre Paco Oliveira y Franco Padilla, delegado de ATE Vías Navegables y de la CTAA Capital.
El día 31, una convocatoria de la CTAA Capital junto a la Corriente Clasista y Combativa y otras organizaciones generó una nutrida columna de diez cuadras, que terminó su primera etapa en el Centro Cívico de San Carlos de Bariloche con la palabra de distintos referentes que condenaron esta acción e intimidaron a la Gobernadora, a representantes del poder legislativo y judicial y a funcionarios policiales para que abriesen el sendero que conduce al lago. Luego marcharon a la entrada del camino del Tacuifí donde llevaron adelante una serie de acciones mientras la policía provincial se preocupaba por cuidar el portón de un posible ingreso y no por cumplir su deber constitucional. Al mismo tiempo, otras organizaciones se encargaban de hacer las presentaciones judiciales pertinentes en la ciudad de Bariloche para lograr un recurso de amparo que obligara a abrir el paso a los manifestantes sin violencia y garantizase la integridad de la Columna Juana Azurduy.
Verón relató que al día siguiente se realizó la marcha de todos los grupos convocados pero ya el panorama era otro: “había una fuerte presencia policial protegiendo la reja y los empleados de Lewis se mostraban violentos, montados a caballo, blandiendo rebenques y otros elementos contundentes al ritmo de canciones folklóricas a todo volumen, como para amedrentar a los manifestantes. Acto seguido, cortaron todo tipo de comunicación: no había Wi-Fi ni telefonía de ninguna clase. En un momento empezamos a recibir piedrazos y gas pimienta desde la propiedad en cuestión, y algunos compañeros resultaron heridos. A su vez, otro grupo logró pasar 300 metros más allá del portón. Entonces los esbirros a caballo comenzaron a levantar polvareda para ocultar las reacciones violentas de sus compañeros, sin tener en cuenta el drone que llevábamos y el coraje de otra compañera de la agencia Télam que filmó todas las agresiones. Gracias a eso, los hechos son de público conocimiento”.
Verón no duda al afirmar que este tipo de acciones directas apuntan a algo más profundo, como llamar la atención sobre la entrega del territorio patagónico a personas y empresas extranjeras, en clara violación de nuestra constitución nacional y demás leyes que versan sobre el tema.
“Para nosotros es evidente que aquí hay una complicidad absoluta de parte del poder judicial, sustentada en los hechos también de público conocimiento, como el viaje todo incluido que jueces de la corte y otros funcionarios judiciales porteños hicieron a las propiedades de Joe Lewis, según consta en la causa por el escándalo de las filtraciones telefónicas del ministro de seguridad porteño Marcelo Dalessandro».
“Esta no es una pelea por un simple camino de acceso a un lago: representa una de las peleas más fuertes por la soberanía, contra una entrega que se ha perpetuado por 30 años gracias al ocultamiento hacia la opinión pública. Por eso también es tan importante la movilización contra la Corte Suprema en tanto instancia final en donde se dirimen estas cuestiones siempre a favor de los poderes de los que son parte. Debemos empezar a recuperar y ejercer la soberanía en todos los sentidos y en todos los territorios de nuestra patria porque, de lo contrario, podemos llegar a perder todo”, condensa Verón, para quien la continuidad de estos reclamos es fundamental y urgente dado que el desmonte y la construcción de barrios privados, el avance de la soja y otros cultivos, la afectación de los ríos, las geografías, los climas, las biodiversidades y la fertilidad de la tierra evidencian el extractivismo que se vive en todo un país donde las empresas se llevan millones de dólares por día mientras que en el seno de su pueblo crece la pobreza.
Para el Capitán Verón el gran desafío es seguir al frente en esta lucha: “por suerte contamos con una gran organización como es la CTA Autónoma que, tanto a nivel nacional como de las distintas provincias, se ha puesto a la cabeza esta disputa; la regional Capital que integro fue la primera en tomar la lucha por la soberanía del Río Paraná para acompañar, impulsar y protagonizar este reclamo que hoy han tomado muchas organizaciones, frentes, foros y demás”. Desde la provincia de Río Negro, y con los ecos del himno ante las puertas de Lewis, Verón reflexionó acerca del valor de esta marcha que, a su entender, “ha servido para imponer en la agenda el hecho de que hay un lago que está en manos de un enviado del gobierno británico, hay un camino argentino con acceso vedado, territorios que seguimos perdiendo y, sobre todo, un deber de recuperarlos como organización gremial, como trabajadores y como argentinas y argentinos”.