Jérome Duval, miembro del Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo está en Buenos Aires para participar de la Iª Conferencia Internacional sobre Deuda, Bienes y Dominación. El reconocido investigador belga, junto a Eric Toussaint, es parte de la Comisión de la Verdad sobre la Deuda Griega que el 18 de este mes debe entregar su informe, en el marco de una enorme expectativa global. Y es explicable, ya que como señala Duval en esta nota: más allá de la democracia y la soberanía, lo que está en juego es la supervivencia del pueblo griego.
-En estos días el gobierno español habla de una reducción del índice de la desocupación y una mejora general de los índices económicos. ¿La crisis termina o por el contrario se profundiza, camino a un desenlace como el de Grecia?
En Grecia o en España la deuda sirve como un elemento de dominación por parte del Poder Económico. El caso español es muy grave. La deuda supera el PBI (Producto Bruto Interno), es decir, todo lo que produce el país en un año representa el total de la deuda pública. Pero, si hablamos de la deuda total, privada, pública, de familias, de empresas, etc. estamos cuatro veces por encima del PBI. El problema de la deuda es brutal.
En España, hemos vivido sobre una burbuja inmobiliaria, la gente se endeudó para adquirir un piso, una casa y desde 2008 sabemos que este sistema va cayendo. Ahora es la hora del movimiento popular, de intentar cambiar las cosas. Y en primer lugar, hay que hacer caer el bipartidismo, ya que tanto los populares como los socialistas han sido fieles soldados del capital.
– ¿Qué pasa con el movimiento obrero español y sus centrales? ¿Se trabaja generando organización popular para enfrentar esta crisis de sistema?
Es un punto central porque el tema de la deuda, desde hace años y sobre todo desde algunos meses atrás se va popularizando, la gente va hablando más y más del tema. La crisis en Grecia está en la conversación diaria. Esto ayuda a que la gente vislumbre de una vez por todas la deuda como un instrumento de dominación, una de las peores perversiones del sistema capitalista.
Se hace carne que la deuda no es algo malo en sí misma, el problema estriba en cómo el capitalismo la maneja y cómo acaba imponiendo planes de austeridad a la población. Además se oculta que se oculta que al menos el 75% de la deuda global del Estado español es privada.
En cuanto al sindicalismo y los grandes gremios son parte de la clase dirigente. La crisis capitalista también los abarca. Más que parte de la solución son parte del problema.
-Los grandes titulares siguen preocupados por la corrupción. ¿Ocultan en realidad que corrupción es el salario que los grupos económicos le pagan a sus gerentes, políticos, burócratas sindicales?
Muchos problemas de corrupción, han afectado a partidos mayoritarios como el PP (Partido Popular) o el PSOE (Socialismo Obrero Español), también a sindicatos y centrales obreras. Creo que hay una crisis del régimen del bipartidismo y también de los grandes sindicatos que están en crisis por la corrupción y una forma de hacer política que tiene que terminar. La gente quiere un cambio haciendo política de otra forma. En este sistema no podremos salir nunca de la corrupción, del super endeudamiento, del despilfarro. Hay que cambiar de sistema, hay que terminar con el capitalismo.
-¿Qué es el CADTM?
-Es el Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo. Ya está presente en más de 30 países. Y luchamos para fortalecer el movimiento social en general en contra de una deuda que no benefició al pueblo.
-Convengamos que dejar de pagar la deuda no es una solución mágica.
Dejar de pagar la deuda no es un fin en sí mismo, pero es un principio. La PACD es la Plataforma de Auditoria Ciudadana cuya consigna es no pagar lo que no debemos. Llamamos a auditar la deuda externa para saber cuanto en realidad debemos, cuanto hay de fraude y corrupción, de traslado de deuda de los grupos económicos al Estado.
No solamente queremos no pagar más deudas que no nos beneficiaron, también pedimos reparaciones a los barrios, a la gente, a los pueblos que han sido machacados hasta la agonía por la crisis. Exigimos que los responsables sean juzgados. Por eso necesitamos un cambio de sistema total. El sistema capitalista no solamente nos empuja a una crisis financiera en forma de deuda, sino también climática, de género, de pensamiento global, es decir, una crisis total, terminal.
El CADTM plantea la lucha contra el sistema-deuda en el marco de una resistencia por un mundo liberado de todas formas de opresión y explotación. Atacar a los fundamentos del poder de las finanzas significa el desmantelamiento de esos mecanismos y, por lo tanto, la anulación de la deuda.
-Cuando hablas pareciera que estas describiendo la crisis de uno de nuestros países.
La crisis que conoció Argentina en los ochenta, años después con los mismos componentes llega a Europa. Son las mismas recetas neoliberales. Los gobiernos títeres de las grandes empresas se hacen los distraídos y aplican las mismas recetas. Esas políticas fracasan en Grecia y van a fracasar de nuevo en España. El estallido seguirá por Irlanda, Portugal. Todos estamos dentro de la misma trampa.
-Vos te referís a recetas que “fracasaron”. ¿En serio creés que fracasaron? La acumulación de la riqueza no deja deja de crecer.
Vivimos una lucha de clases brutal. Como dijo muy bien el multimillonario Warren Buffet, “estamos en una lucha de clases pero somos nosotros los que la estamos ganando”. Por eso sólo los pueblos, los trabajadores son los perdedores en este sistema. El desafío enorme que tenemos ahora en Europa es desenmascarar y derrotar esos planes de austeridad que encubren el saqueo de nuestras naciones.
-Cómo evaluás la situación de Grecia? Junto a Eric Toussaint están auditando la deuda de ese país.
Este viernes (por hoy) se va a conocer si Grecia va a seguir pagando. Esa nación que hace un reembolso muy grande cada mes, se juega su destino. El Estado ha ido pagando a los acreedores pero ya no tiene recursos. Debe elegir entre seguir pagando y la explosión social.
Dentro del Partido Syriza hay una lucha de poder muy grande entre los que dicen “basta de pagar” y aquellos que no quieren romper con la dependencia de la deuda. Si ganan estos últimos será un suicidio. Nosotros con un equipo donde está Tousain estamos haciendo la auditoría de la deuda griega, en otras palabras: desnudando su ilegalidad.
Estos procesos de auditorías pueden ayudar a los países endeudados a tomar una decisión unilateral y soberana, dado que tienen poco control sobre su deuda, ya que a menudo, ésta se expresa en otras monedas o está sujeta a la legislación de otros países (cuyas jurisdicciones son, con frecuencia, más favorables a los acreedores). El CADTM lo reivindica como una respuesta necesaria a la hora de retomar la soberanía perdida, permitiría a los pueblos decidir sobre la utilización de sus recursos provenientes de su trabajo y reconquistar un poder popular en el sentido verdaderamente democrático.
El informe preliminar de la Comisión de la Verdad sobre la Deuda Griega debe entregarse el 18 de junio. Nosotros pensamos que más allá de la democracia y la soberanía, lo que se juega es la supervivencia del pueblo griego.