La Asamblea de Trabajadores del diario Bae denunció el vaciamiento de ese medio por parte del Grupo Olmos, emparentado en matería política y de negocios con el Gobierno y con Antonio Calo, titular del gremio metalúrgico.
«Hoy nos enteramos de un despido en la redacción de BAE. En este caso de un colaborador permanente que escribía semanalmente en el diario. La empresa justifica el despido “con causa”, diciendo que el compañero hizo abandono del lugar de trabajo. Algo que no le pueden pedir a un colaborador que en 6 años de desempeño nunca concurrió a la redacción. Realizaba la tarea desde su casa a partir del pedido del material por parte de un editor. Exigimos la inmediata reincorporación del compañero.
Desde la llegada de los hermanos Olmos, en octubre de 2010, al diario BAE Negocios se produjo una masiva salida de trabajadores hacia otros medios o directamente a otros proyectos fuera de los medios.
El éxodo estuvo impulsado por una desorientación en torno al proyecto editorial por parte de la conducción del grupo Crónica (cierre de suplementos, lanzamientos y relanzamientos), maltrato cotidiano y ataques sistemáticos a las condiciones de trabajo por parte de la empresa.
Según datos de la Jefatura de Gabinete, de 2009 a 2013, el Grupo Crónica (propietario del Diario BAE) recibió $101 millones de publicidad oficial. Este apoyo financiero por parte del gobierno no le impide evadir sistemáticamente el pago de los aportes previsionales.
Para desarrollar su política de vaciamiento, la empresa se valió de Cristina Quintana, a la que presentaron como “coach” del Grupo Crónica. El cargo de esta persona debería llamarse: Directora de desvinculaciones “acordadas”. El método roza la perversión. Luego del bullying a algunos trabajadores por parte de la patronal, viene el ofrecimiento de Quintana: “tenemos una plata para ofrecerte”, “te conviene, acá no tenés lugar. Lo mejor es que te vayas así”, “es esta plata o esperar el telegrama”, “Vos no te preocupes, yo conozco gente y te puedo ayudar a conseguir otro trabajo”. Esta última promesa no se cumplió nunca, obviamente. Quintana es responsable, también, del vaciamiento del diario marplatense El Atlántico.
Hablamos de vaciamiento porque ninguno de los puestos que quedaron vacantes fue repuesto. En Economía se fueron 5 redactores, 6 en política, 2 en finanzas, 3 en negocios, 1 en deportes, 1 en judiciales, 2 en arte, 2 en comercial, y 7 en intendencia. Además del cese laboral de más de 15 colaboradores que escribían por lo menos una vez por semana en el diario y facturaban. Los precarizados, al igual que en el resto del gremio de prensa, son los más castigados en términos de estabilidad laboral.
El diario llamado BAE NEGOCIOS llega al extremo de tener UN SOLO REDACTOR, el editor, en la sección de Negocios.
En el caso del personal de intendencia, su salida tiene que ver con una política de persecución gremial. Cada vez que recurrieron a los delegados para defender su derecho a cobrar horas extras, cobrar feriados y ACCEDER A SUS RECIBOS DE SUELDOS, fueron amedrentados y luego separados por parte del “jefe de seguridad” de los Olmos. En la actualidad, los Olmos, contrataron a un grupo de seguridad privada sometidos a la precarización generada por la tercerización empresaria.
Todo este vaciamiento de la redacción implicó un aumento de la cantidad de trabajo por redactor.
La sobrecarga se agudiza aún más por el trabajo en dos redacciones distintas. Hace un año, la empresa fundó una nueva razón social y mudó a un nuevo edificio a un grupo de trabajadores para separarlos de su representación gremial. En la actualidad, la dirección del diario y la mayoría de los editores, funcionan en la redacción de Combate de los Pozos bajo la razón social Aconcagua S.A., mientras que la mayoría de los redactores y el resto de las secciones (arte, corrección, sistemas, ripeo) lo hacen en la redacción de Pompeya bajo la razón social BAE Negocios S.A..
En los últimos meses, aumentaron entre los trabajadores las enfermedades vinculadas al stress laboral, sólo en los últimos 15 días tuvimos 4 casos, incluido el llamado a un servicio de emergencias médicas a la redacción. A este clima se le suma el maltrato cotidiano por parte del director periodístico Fernando Alonso contra los trabajadores. Incluso, algunos compañeros deciden trabajar los días que están enfermos desde sus casas para evitar el maltrato por parte de la dirección.
A la situación hasta aquí descrita, se le suma este despido y un nuevo intento de ajuste impulsado una vez más por la “desvinculadora” serial Cristina Quintana. Llamados a reuniones, propuestas de retiros, amenazas de telegramas: “Decidan entre ustedes dos quién se va, porque si no lo va a decidir la empresa”.
Por todo esto los trabajadores de BAE nos declaramos en estado de alerta y asamblea permanente. Denunciamos este vaciamiento. Exigimos la reincorporación del compañero colaborador despedido y que se ocupen los puestos vacantes.
Con este reclamo nos sumamos al retiro de firmas convocado por el Plenario de Delegados de la Prensa Escrita, Oral y Televisiva y en una próxima asamblea definiremos nuevas medidas».
Fuente: Asamblea de trabajadores del diario BAE Negocios