En la madrugada de ayer, de acuerdo a una resolución de la Cámara de Trabajo, los 17 despedidos de Lear serían reincorporados a sus puestos de trabajo. Sin embargo, cuando se esperaba que los compañeros se incorporaran a su lugar de trabajo, una escribana de la empresa leyó un telegrama indicando una suspensión con goce de sueldo, mientras Lear pueda comunicar el proceso preventivo de crisis –exigencia de la justicia para generar un despido masivo-.
Esto fue tras la intimación que tenía la empresa luego de un conflicto que mantienen los trabajadores desde hace casi 8 meses. “Sabemos como funcionan las multinacionales, sabemos qué tipo de relación tienen las patronales con la burocracia sindical y conocemos el rol que juega el Ministerio de Trabajo, que precisamente no es a favor de los trabajadores”, indicó Ricardo Peidro, quien asistió a la movilización junto a Daniel Jorajuria, Cinthia Pok, Silverio Gómez, el Bloque Organizativo Gremial y otros compañeros de la Central.
Ahora hay que ver que actitud tiene el Ministerio de Trabajo: “porque si le abre un proceso preventivo de crisis, y le da la razón a la empresa, la cuestión es alevosa”, explicó Peidro.
Tras el anuncio de la escribana, se produjo un corte espontáneo en la Avenida Panamericana en señal de protesta: “La CTA estuvo desde el primer momento con los compañeros de Lear y lo seguirá estando. Más allá de todos los conflictos que movilizan a la Central en todo el país, la lucha de los trabajadores de Lear constituye un símbolo de los compañeros enfrentando a una multinacional y a una burocracia sindical que juega abiertamente a favor de la patronal”, aseguró el Secretario Adjunto de la Central.
Por su parte, Daniel Jorajuría expresó: “En definitiva, asistimos a otra burla de esta corporación económica ante un fallo de la Cámara Nacional del Trabajo. Esto debe hacer reaccionar al gobierno sobre cómo actúan estas corporaciones económicas, con absoluta libertad e impunidad en relación a los trabajadores. Se llevan todas las ganancias, pero cuando un trabajador se organiza y los enfrenta por mejores condiciones de trabajo, inmediatamente son suspendidos, despedidos”.
De acuerdo a Jorajuría, este conflicto merece una reflexión, “sobre los modos de construcción de poder de la clase trabajadora en el país, y lo que vemos allí es que hubo 200 despidos, y hoy fuimos a respaldar la reincorporación de 17 de ellos. Ahora nos preguntamos si se puede seguir jugando estrategias de construcción de poder dentro del sistema que nos impone la legislación argentina”.
“Por ello es necesario profundizar este debate y modificar la legislación. Porque lo que sentimos en la puerta de Lear, es que siguen gobernando las corporaciones económicas y sindicales con complicidad del Gobierno que no avanza en democratizar las relaciones del trabajo”, finalizó.