La Multisectorial por la Suspensión del pago e Investigación de la Deuda Pública y por la Defensa del Patrimonio Nacional y los Bienes Comunes, integrada por organismos de Derechos Humanos, sindicatos, partidos políticos, organizaciones sindicales, estudiantiles, religiosas y personalidades, realizó el jueves su primer intervención pública en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires.
En la tarde el jueves, mesas con militantes de las diferentes organizaciones que integran la Asamblea, se instalaron en diversos puntos estratégicos de la Ciudad con el objetivo de difundir una postura que se va manifestando públicamente de suspensión del pago de la deuda y que se abra un proceso de investigación.
“Esto implica tomar con seriedad un tema que nos va flagelando a todo el pueblo argentino”, explicó a ACTA Fabio Basteiro, de Unidad Popular quien estuvo presente en la intervención de Florida y Diagonal Norte.
La mesa ubicada en Plaza de Mayo, luego de la intervención, marchó junto a las Madres en el marco de la marcha que realizan cada jueves, reclamando por la aparición con vida de sus hijos.
Carolina Ocar, Secretaria de Comunicación de la CTA, destacó la importancia del lanzamiento de la campaña con presencia en distintos puntos de la Ciudad «además de haber estado en la mesa central me pareció muy simbólico acompañar con la iniciativa la ronda de todos los jueves de nuestras queridas Madres de Plaza de Mayo, que hace 37 años vienen denunciando la responsabilidad de la ultima dictadura en complicidad con sectores empresarios para condenarnos a los trabajadores al pago de la deuda mas ilegítima».
También participó de la actividad Cynthia Pok, Secretaria de Formación; José “pepe” Peralta, Secretario General de CTA Capital y Jorgelina Sosa, Secretaria de Género de CTA Capital.
Por su parte, Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo–Línea Fundadora agregó: “Queremos dar a conocer un estudio que se hace desde muchas organizaciones que siempre seguimos de cerca la historia de la deuda externa. Debemos renegar de las políticas económicas de Cavallo, quién pasó al Estado la deuda de empresas privadas, no puede ser que nosotros tengamos que pagar una deuda que no contrajimos”.
“La idea es impulsar un debate público en torno a una deuda que es ilegítima y que ahora la tenemos que pagar como pueblo, y además le reclamamos al Congreso que asuma su responsabilidad y suspenda todos los pagos, comenzando con un proceso de auditoría, para no pagar lo que no nos corresponde”, explicó Beverly Keene, integrante de Diálogo 2000-Jubileo Sur.
La experiencia de países hermanos
Beverly Keene se refirió a los antecedentes existentes en relación a auditar deudas que los países latinoamericanos mantienen con los organismos internacionales: “En Ecuador se hizo una auditoria encarada por el ejecutivo y con participación de muchas organizaciones del campo popular. Eso llevó a una reducción del 70% de la deuda”.
“En los años ’30, en Brasil también se realizó una investigación y se encontraron un montón de irregularidades. En Argentina tenemos un montón de Fallos judiciales, como la Causa Olmos, que declaró más de 400 actos ilícitos en la acumulación de esa deuda. Y mientras hablan del fallo de un juez estadounidense, ni la Justicia, ni el Ejecutivo, ni el Congreso tienen en cuenta la justicia local”, agregó Keene a la charla con ACTA.
Además, Basteiro manifestó: “Es una deuda eterna y que tiene como objetivo saquear a nuestro pueblo de los bienes comunes, la deuda es el petróleo, es el agua, son los bosques. Es claramente un instrumento de dominación y sometimiento de un modelo económico extractivista que tiene siglos en argentina, y que pone en riesgo el futuro de la propia humanidad”.
Nora Cortiñas recordó el momento histórico en que el país comenzó a endeudarse: “Lo más curioso es que el Gobierno no deja de decir que es una deuda que no contrajo, y eso ya lo sabemos. Esta deuda fue creada en 1976 por la dictadura cívico-militar-religiosa y se fue incrementando porque aceptaron las imposiciones que impuso el Fondo Monetario Internacional. Debe imitarse el camino de Ecuador, o el de Alemania que dijeron ’No pagamos hasta que el pueblo esté en condiciones de vivir con dignidad’”.