Las acciones del Día Internacional de la Mujer Trabajadora se hicieron sentir en las calles, el territorio y lugares de trabajo de todo el país. En Buenos Aires, la CTA en unidad con el Bloque Intersindical Feminista, paró y marchó en una gran movilización que colmó las inmediaciones del Congreso Nacional.
Con el eje puesto en las brechas económicas y sociales de género, junto a la denuncia de sobre la violencia machista que impone el régimen patriarcal, la Central adhirió al Paro Internacional Feminista realizando miles de acciones a lo largo del país bajo una consigna que pone en el centro de la crítica al poder judicial: «Con esta justicia no hay derechos ni democracia, la deuda es con les/las trabajadoras».
En la ciudad de Buenos Aires, una vez más la tradicional marcha del 8M fue imponente. Desde las primeras horas de la tarde, mujeres y diversidades organizadas en distintos colectivos fueron vistiendo de color verde violeta las inmediaciones de la Plaza de los Dos Congresos. Poco a poco, cuerpos y carteles fueron llenando de sentido con sus demandas contra la violencia machista y por políticas públicas que pongan fin a las brechas de género, tan acentuadas en el momento actual del capitalismo.
“Nuestros barrios son invivibles pero venimos a decir acá, en unidad, que no estamos resignadas y que vamos a enfrentar el ajuste. Las mujeres, junto nuestros hijes y diversidades venimos a reclamar lo que por derecho nos corresponde”, definió Leonor Cruz, Secretaria de Géneros y Diversidades de la CTA y FeNaT. La dirigenta territorial señaló que “el ajuste del gobierno tiene nuestra cara, nuestro cuerpos llevan esa marca. La primer violencia que sufrimos en nuestros barrios es por las políticas sociales que este gobierno no implementa”.
El Bloque Intersindical Feminista -integrado por CTA Autónoma, CGT, CTAT, SIPREBA, UTEP, CCC y CNCT- que por la mañana había realizado una conferencia de prensa en las puertas del palacio de Tribunales, pasadas las 16 horas comenzó su macha. La inmensa columna integrada por una infinidad de organizaciones sindicales y territoriales partió de Avenida 9 de Julio hacia Congreso encolunmadas en unidad enarbolando sus banderas, cantando y gritando sus reclamos y denuncias contra el patriarcado, para luego fundirse en la fiesta feminista que cantaba y bailaba frente al escenario ubicado en el centro de la plaza. Allí, pasadas las 19 se leyó en forma coral un extenso documento consensuado con un pormenorizado detalle de las denuncias, reivindicaciones y demandas del movimiento feminista.
Testimonios de las mujeres de la Central
Francisca Staiti, Secretaria General de CONADU Histórica destacó que la docencia universitaria está en las calles “porque la consigna ´La Deuda es con nosotras´ es una realidad en la universidades nacionales. Necesitamos presupuesto para tareas de cuidado, jardines paterno- maternales, implementación de protocolos sobre violencia de género con presupuesto, la aplicación plena del Convenio 190 de la OIT y la ley “Micaela”. También exigimos que las mujeres tengan acceso a los puestos de conducción en la universidades nacionales porque el “techo de cristal” es una realidad aunque las mujeres seamos a amplia mayoría”.
La secretaria de previsión social de la CTA, Olivia Ruíz, resaltó la amplia unidad de las organizaciones sindicales y sociales “para conmemorar el 8M y reclamar todo lo que nos falta”, pero también resaltó el logro de la conquista de la Moratoria Previsional convertida en ley la semana pasada e indicó que “tenemos que luchar contra la discriminación por edad y generar un fuerte debate hacia una reforma previsional que nos contenga a todos y todas, garantizando una jubilación digna”.
Alejandra Ángriman, Secretaria Gremial de la Central y Presidenta del Comité de Mujeres Trabajadoras de la Confederación Sindical de las Américas (CSA), destacó el doble carácter del día: “De celebración por las conquistas y de lucha por todo lo que nos falta a las mujeres y diversidades de Argentina y América”. La dirigenta afirmó que es necesario implementar “derechos universales porque el neoliberalismo pretende focalizar solo en algunos sectores el acceso a derechos. Necesitamos equidad, políticas de cuidado y el Estado debe ser el garante de esas políticas universales y que haga cumplir, por ejemplo, la implementación de jardines infantiles en los lugares de trabajo”.
La secretaria de relación con los pueblos originarios, Miriam Liempe, destacó la participación de las mujeres de los pueblos originarios y el contexto de fuerte presión del Extractivismo sobre los territorios. “En este día especial, pedimos por nuestras hermanas mapuches, presas políticas. Lo hacemos en sororidad y en solidaridad con toda la clase trabajadora”. Liempe destacó también “la iniciativa de la CTA de ir hacia un Estado plurinacional e intercultural, como camino emancipatorio”.
Clarisa Gambera, Secretaria de Géneros de la CTAA Capital y dirigente de ATE, puso el acento en “La unidad del Bloque Sindical que se construyó en la resistencia al macrismo y que vuelve a marcar incidencia en la agenda política. Creemos que las mujeres estamos señalando el camino: Unidad frente a la derecha que se organiza para volver”.
Por la mañana, el Bloque Intersindical Feminista integrado por CTA Autónoma, CGT, CTA T, SIPREBA, UTEP, CCC y CNCT, realizó una conferencia de prensa en las puertas del palacio de Tribunales «para denunciar el accionar del Poder Judicial y de los poderes fácticos que pretenden condicionar nuestra democracia, así como para demandar la profundización del proyecto nacional, popular y feminista, para dar respuesta a las necesidades de nuestro pueblo», según expresa el documento unitario.