Luego de conocerse el informe sobre la ejecución del Presupuesto 2022 de la Ciudad de Buenos Aires, algunas secretarías de la Central porteña pusieron de manifiesto las implicancias reales de una política diseñada en favor de unos pocos.
En el caso de la ciudad que tiene el mayor presupuesto por persona de Argentina, y es una de las más ricas de la región, cuenta con un presupuesto anual aproximado de 940 mil millones de pesos. De los cuales, según se pudo conocer hace días, si bien se ejecutó la cuarta parte del mismo, que es lo esperado para los primeros tres meses del año, existieron algunos rubros privilegiados como el de publicidad y propaganda oficial.
Si se toma en cuenta lo que
corresponde a dicho rubro y se suma el presupuesto de la
Subsecretaría de Comunicación Social, para todo 2022 está
presupuestado destinar 5 mil millones de pesos para tal fin. Y en lo
que va del año, las y los porteños han gastado 12 millones de pesos
por día en propaganda oficial.
María Eva Koutsovitis, integrante
de la Cátedra Libre de Ingeniería Civil (CLIC) y del Frente de
Organizaciones Salvador Herrera, aseguró que “Mientras esto sucede
hay otras áreas que no son tan privilegiadas y el caso de la
vivienda tal vez sea uno de los más elocuentes, ya que la ciudad se
encuentra en emergencia habitacional, con uno de cada seis de sus
habitantes sumido en esta situación, el 40 por ciento de los hogares
que pagan alquiler y un Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC), que
cuenta con un programa llamado “Crédito Primera Vivienda” pero
que hasta ahora no ha ejecutado ni un solo peso del presupuesto
destinado a esos créditos”.
“En el caso del barrio de la
Boca, que tiene un enorme déficit habitacional, existe otro programa
llamado “Rehabilitación La Boca”, que durante el primer
trimestre tuvo una ejecución igual a cero pesos. Así como sólo se
ha ejecutado cerca del ocho por ciento del Programa de Integración y
Transformación de Villas, lo que representa una clara sub ejecución
presupuestaria y habla de cómo el macrismo logra disfrazar las
políticas públicas detrás de nombres amables que ocultan
realidades bochornosas”, finalizó Koutsovitis.
Así las cosas, el mapa de
prioridades del Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta muestra a las
claras cuáles son las áreas o sectores que siempre se ven
privilegiados más allá de lo que se plantee en términos
discursivos. Pero como los datos abundan, es menester observar que
hace unos días la sociedad se movilizó en el marco de otro
aniversario del Ni Una Menos y es allí donde también el gobierno
porteño ha sub ejecutado la partida presupuestaria que tiene que ver
con la Dirección General de la Mujer. Por lo que mientras las y los
porteños destinaron 12 millones de pesos diarios a la publicidad
oficial, el área de detección, protección y asistencia a víctimas
de trata solo gasta 800 pesos por día.
Pablo Spataro, secretario General
de la CTAA Capital, aseguró que “los datos que arroja un primer
análisis del presupuesto y su ejecución, muestran a las claras
cuáles son las prioridades del gobierno de Horacio Rodríguez
Larreta: la imagen de su gestión, su imagen como candidato
presidencial y los negocios multimillonarios que se tejen en torno a
la cosa pública que, desde hace 15 años, es botín de guerra para
el poder real, las grandes empresas y corporaciones de todo tipo”.
“Desde hace un tiempo, con
organizaciones hermanas venimos reclamando una serie de puntos que
son centrales para miles de porteños y porteñas; políticas que
podrían llevarse adelante con un par de puntos de ese presupuesto
hecho a medida de los intereses empresariales, mal gastado en las
áreas más sensibles para la sociedad y lejos de las necesidades
reales. La publicación de estos datos muestra que el presupuesto de
la Ciudad es el fiel reflejo de un gobierno a espaldas del pueblo”,
concluyó Spataro.
La educación como motivo de anhelo
y desvelo del gobierno de Cambiemos en la Ciudad tampoco escapa a la
vista de la sociedad como una máscara discursiva cuyo piolín se
corta al ver el pálido 8 por ciento de los subsidios ejecutados para
afrontar gastos de infraestructura.
Daniela Rodríguez, secretaria de
Formación de la CTAA capital, reflexionó lo siguiente: “Si
pensamos en la educación de la ciudad, no es una sorpresa para nadie
la tendencia al desfinanciamiento como estrategia para privatizar el
acceso a la educación, forzando a las familias que pueden pagar a
optar por la educación de gestión privada”.
“La crisis de infraestructura, la
brecha tecnológica y los paupérrimos e indecentes salarios docentes
son tres de las más graves problemáticas educativas acrecentadas en
este tiempo. La pregunta es: ¿Qué parte del presupuesto se destina
a subsanar estas brechas entre estudiar en una escuela confortable y
calefaccionada y una que se cae a pedazos en la cabeza de
estudiantes y docentes?”, concluyó Rodríguez.
En lo que concierne a la economía
social, otro gran discurso para el Gobierno Porteño, el presupuesto
ejecutado para mejorar o impulsar la comercialización de los
productos de dicha economía, hasta ahora aparece en cero pesos.
Habrá que esperar para corroborar cual será el financiamiento de la
“Ley Farmacity” que libera de los gravámenes de Ingresos Brutos
a las grandes empresas que colaboren en el proceso de expulsión de
las y los vecinos de los barrios populares codiciados por el negocio
inmobiliario.