Durante la jornada de hoy, compañeras y compañeros de la CTAA Capital, de la Federación Nacional Territorial (FeNaT) CTAA Capital y de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTAA), participaron de una recorrida por el Museo Malvinas y por el Ex Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio ESMA (Ex CCDTYE ESMA) guiados por trabajadoras y trabajadores de ATE que cumplen funciones en dicho Espacio Para La Memoria.
Situado en plena Avenida del Libertador, éste fue el principal centro clandestino de detención de la última Dictadura Cívico Militar, por sus dimensiones, situación geográfica y disponibilidades logísticas que brindaba la propia ESMA: herramientas, espacio y personal calificado para sustentar la maquinaria de terror, mientras funcionaba como pantalla legal a las actividades clandestinas.
El recorrido comenzó a las 11
horas en el Museo Malvinas, donde las y los guías hicieron hincapié
en la historia del archipiélago más allá de la guerra, su
importancia geopolítica de cara al futuro de nuestra soberanía y en
la lucha que debieron llevar adelante durante la era macrista en
contra de la desmalvinización de la institución. Situación cuya
continuidad no deja de sorprenderles, aunque les reafirma en su
defensa clasista del relato museológico que llevan adelante en cada
recorrida
“Como gremio queremos discutir el
modelo de país, las políticas públicas y poner al Estado al
servicio del Pueblo. Y desde nuestro lugar de promotores de políticas
públicas queremos discutir los contenidos y llevar adelante un museo
vinculado a nuestra región, por el Pueblo y para el Pueblo”, dijo
en uno de los guías ante el contingente, al momento de explicar lo
que viven las y los trabajadores del museo.
Finalizado el recorrido fue tiempo
de pasar al Ex Centro Clandestino de Detención de la ESMA: un predio
de 17 hectáreas, con 35 edificios y por donde pasaron alrededor de 5
mil detenidas y detenidos desaparecidos entre el 24 de marzo de 1976
y los días previos a la asunción del ex presidente Raúl Alfonsín,
en 1983.
La recorrida contó con la
participación de uno de los sobrevivientes del propio Centro
Clandestino de Detención, Alfredo “Mantecol” Ayala, referente,
por aquellos años, del Movimiento Villero Peronista, quien contó de
primera mano el tormento que vivió durante sus tres años de
cautiverio y los trabajos a los que eran obligados: desde albañilería
y limpieza, hasta análisis de la información, redacción de
informes y producción de contenido para el proyecto político del
Almirante Emilio Massera, integrante de la Junta Militar.
Daniela Rodríguez, secretaria de
Formación de la CTAA Capital, sostuvo que se trato de “una visita
muy importante y movilizadora para todas y todos en el marco de un
Mes de la Memoria con muchas actividades para nuestra Central y para
cada organización. Pero esta fue muy especial, sobre todo porque
para muchos compañeros y compañeras de los territorios fue su
primera vez en un espacio tan relevante para nuestra historia como
pueblo, y su participación es muy importante en estas actividades
que hacen a su formación política integral. Entonces, recorrer un
lugar como este, en donde fueron detenidos desaparecidos miembros de
nuestra clase trabajadora, delegados y delegadas, para nosotros
también como militantes sindicales es fundamental para conocer la
historia contada por compañeros que también son trabajadoras y
trabajadores del Estado”.
“A su vez, poder recorrer este
lugar tan bien mantenido como espacio para la memoria y que sigue
contribuyendo a los juicios para conocer la verdad sobre aquella
dictadura, aportando pruebas producto de la investigación y de
testimonios tan valiosos como el que nos tocó compartir hoy con
Mantecol, que así como nosotros intentamos, sigue con las banderas
en alto de nuestros 30 mil compañeros y compañeras detenidas
desaparecidas, fue muy poderoso”, agregó la compañera.
Al finalizar la actividad, Pablo
Spataro, secretario General de la Central porteña, aseguró: «Esta
visita a los sitios de memoria es muy importante para la CTA Autónoma
Capital porque a la vez conforman un encuentro con trabajadores y
trabajadoras del propio lugar que al mismo tiempo son parte de ATE y
la Central”.
«Estar aquí hoy, en un
espacio de memoria donde funcionó la maquinaria del terror genocida,
es un triunfo de las y los sobrevivientes, de los organismos de
derechos humanos y del pueblo que debe impulsarnos a ser capaces no
solo de recuperar la memoria de las y los 30 mil desaparecidos,
conocer sus historias militantes, su compromiso y sus obras, sino
también a ser capaces de darle continuidad al proyecto político y
colectivo por el cual lucharon y soñaron, que hablaba de
emancipación, libertad y soberanía», reflexionó Spataro.
Luego de cuatro horas finalizó el
recorrido con una puesta en común con las y los compañeros de la Ex
Esma, en la que Spataro recordó a Alberto Chejolán y mencionó la
obra del Bachillerato Popular que lleva su nombre. Por su parte,
Mantecol recordó a Chejolán, su lucha y el golpe que inflingió su
muerte en la militancia. El encuentro finalizó con la promesa de
darle regularidad a estas visitas.