Ante la grave situación sanitaria por la que atraviesa la ciudad de Buenos Aires, en el marco de la pandemia declarada por Covid-19, la CTA-A Capital elaboró un documento en el cual responsabiliza a las autoridades porteñas por la multiplicación exponencial de casos positivos, exige cambios de autoridades y la conformación inmediata del comité de crisis para abordar tan delicada situación.
Por los motivos de salud pública ya conocidos, la CTA Autónoma de la Capital ha solicitado con fecha 30 de marzo de este año, un pedido al gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para que conformara un Comité de Crisis con representación de áreas estratégicas del Estado, de Sindicatos, Organizaciones Sociales, Instituciones Religiosas, Clubes de barrios, sectores de la producción, etc., con la finalidad de poder diagnosticar, monitorear y llevar adelante políticas que recogieran la diversidad de miradas existentes en el distrito.
Sosteníamos, y aún sostenemos, que ante la gravedad de los hechos se requiere la conformación de un frente único para trabajar sobre la base de consensos contra la enfermedad que avanza a escala planetaria. Este reclamo fue llevado también al Consejo Económico y Social y la respuesta ha sido la misma en ambos espacios: el silencio.
También hemos advertido que lxs trabajadorxs que están en la primera línea combatiendo a la enfermedad, desarrollando tareas esenciales, necesitan condiciones seguras en el desarrollo de sus funciones. Es el Estado quien debería proveer todos los insumos necesarios: elementos de protección personal (EPP), protocolos de intervención y formación específica, tanto para preservar la vida de lxs trabajadorxs, como para sostener la atención comunitaria.
Muchas de las propuestas que planteamos no han tenido recepción, o las que la tuvieron, han llegado tarde. Contamos por cientos lxs infectadxs por COVID19 en áreas del Estado como así también en los espacios comunitarios.
En este contexto, advertimos que las organizaciones populares como asi también lxs trabajadorxs de aéreas esenciales, somos lxs que estamos sosteniendo la primera línea en los hospitales, escuelas, en dispositivos de atención a la niñez, comedores y merenderos, como promotoras de salud y contra las violencias de género, asistiendo a las familias de los barrios populares, poniendo el cuerpo en un contexto adverso y sin ningún insumo y cuidado garantizado por parte del Estado.
Reclamamos y exigimos también, a lo largo de todos estos años, la falta de agua en muchos de los barrios de la Ciudad y hemos recibido una y otra vez la misma respuesta: el silencio. Hemos vuelto a exigir en estos tiempos de emergencia sanitaria una política que garantice el acceso no sólo al agua segura sino a un conjunto de servicios básicos para el conjunto de la población y no hemos recibido una respuesta que pudiera resolver el problema. Sin agua la pandemia avanza.
Ante este cuadro de situación urgente y desesperante, el 7 de abril de 2020, la CTA Capital Autónoma concurrió a la Justicia junto al Observatorio Social de la Ciudad, la Cátedra Libre de Ingeniera Comunitaria y el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, presentando un amparo y solicitando una cautelar, para garantizar de manera urgente el acceso al agua para toda persona que no lo tuviera, o lo tuviera de manera interrumpida.
La Justicia dio lugar al planteo que realizamos y ordenó al Gobierno de la Ciudad a cumplir con lo solicitado y que elaborara un plan de contingencia. El gobierno ni presentó ninguna propuesta, ni cumplió con el abastecimiento de agua, generando así mejores condiciones para la propagación del virus en los lugares más vulnerables.
Desde el 7 –fecha en que se presentó el amparo y la cautelar- al 21 de abril –fecha del primer resultado positivo por COVID19 en el Barrio Padre C. Mugica- pasaron 15 días sin respuesta por parte del Gobierno de Larreta con una fallo de la Justicia que nunca respetó ni cumplió.
Asimismo, durante 15 días casi todas las manzanas del Barrio Padre Mugica no tuvieron agua, tiempo en el que el virus se expandió de una manera que era previsible cuando no se toma ningún tipo de medidas. El gobierno es responsable de esta situación.
El PRO lleva 13 años de gobierno en la Ciudad con políticas que han privilegiado el negocio sobre los derechos de las mayorías y que se ven expresadas en el abandono y la precariedad existente en los barrios populares de la Ciudad.
Se ha querido mostrar por parte de quienes gobiernan, como un gran logro el proceso de reurbanización del Barrio Padre Mugica y está a la vista, que no han podido o no han querido, a pesar de haber gastado más de 36 mil millones de pesos, poder asegurar un servicio tan básico como el acceso al agua para todxs. Hoy, la realidad y los hechos hablan por sí solos.
Queremos decir con mucha bronca y mucho dolor, que integrantes del Consejo Directivo de la CTA Capital se encuentran infectados con COVID19 e internados, así como también otros afiliados y familiares directos de compañeras y compañeros se encuentran atravesando una difícil situación de salud.
El gobierno de Larreta tiene que hacerse responsable de esta situación como así también todas las áreas que están interviniendo y fundamentalmente el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación. El Sr Diego Fernández, responsable de la Secretaría de Integración Social Urbana de del Barrio Padre Mugica, tiene que renunciar de manera inmediata por ser responsable directo de esta situación.
La desidia y la voracidad de quienes gobiernan ha llevado a un estado de abandono por parte del Estado de la Ciudad a muchas familias trabajadoras. La falta de agua no sólo es un problema del Barrio Padre Mugica sino de muchos de los barrios de la Ciudad que debe resolverse de manera urgente. El cuidado por parte del Estado de quienes se encuentran al frente de tareas esenciales tiene que ser una prioridad, por la finalidad de su función, pero también para el resguardo de sus propias vidas.
Volvemos a manifestar, la urgente necesidad de conformar un Comité de Crisis de la CABA para resolver de manera integral todas las necesidades planteadas, con presencia de áreas idóneas del Estado Nacional, para frenar esta situación. No aceptamos, el silencio como respuesta, porque eso fue lo que nos llevó a la dramática situación de hoy: EXIGIMOS SOLUCIONES URGENTES A PROBLEMAS URGENTES. EL GOBIERNO de la CIUDAD ES RESPONSABLE.