Centro-gallegoDurante esta semana realizaron una olla popular en la que exigieron el pago de los haberes adeudados hace ocho meses, los aguinaldos, además de una deuda de años anteriores. A su vez, denunciaron el vaciamiento y la falta de suministros, producto de la actual gestión interventora, a cargo de Martín Moyano Barros.

El Centro Gallego se encuentra en situación de crisis económica desde 2002 y fue intervenido en tres oportunidades.

Al respecto, Yolanda Guitian, enfermera por más de 25 años en la institución, explicó: “Estamos hartos de falsas promesas, de las mentiras del interventor Moyano Barros. Hay funcionarios oficiales que deben salir a responder por qué están permitiendo el vaciamiento del Centro Gallego. Esos funcionarios son el ministro Jorge Triaca –que no desconoce que de 1500 trabajadores hayan quedado sólo alrededor de 800, debido al vaciamiento y saqueo que está haciendo esta intervención-, el INAES, el Ministerio de Desarrollo Social, todo con la complicidad de una comisión interna que responde a Héctor Daer, del gremio de la sanidad”.

En el mismo sentido, María, enfermera del lugar desde hace 8 años, dijo: “Ya no podemos vivir de esta manera. Estamos al límite. Con mil pesos por semana no llegamos. Muchos de los compañeros tienen situaciones críticas. En mi caso particular, tengo dos hijos, uno con discapacidad, y tratamos de salir adelante con esto que nos pagan. Esto viene desde noviembre. Son ocho meses sin recibir un sueldo completo”.

Los trabajadores denunciaron que en el centro faltan de suministros, desde jabón para el lavado de manos hasta antibióticos y analgésicos.

“Los trabajadores también estamos reclamando el saqueo a nuestro bolsillo, porque hace ocho meses que no nos pagan, ni los aguinaldos, más una deuda que quedó pendiente de años anteriores. Su única respuesta es intentar vender el Centro al grupo Ribera Salud, denunciado en España por fraude y estafa, que dice querer comprar este establecimiento para que el hospital siga funcionando para los socios y trabajadores. Nosotros sabemos que es mentira, porque este grupo también administra la Fundación Favaloro, y hoy, 60 trabajadores de esa clínica están pidiendo su reincorporación. Si no pueden salvar a su gente, menos van a venir acá a darnos una solución”, expresó Guitian.

El Hospital cuenta actualmente con 4.000 socios que también reclaman la falta de médicos para su atención. Finalmente, “Este Hospital es necesario para la comunidad en esta gran ciudad, y reclamamos a los funcionarios que, si hay plata para la timba financiera, haya plata para sostener un hospital y ponerlo a funcionar en la red de hospitales públicos”, finalizó Guitian.

 

Fuente: Agencia CTAA | www.agenciacta.org 

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