En la mañana del día 30 de mayo, la central porteña acompañó junto a muchas otras organizaciones políticas, sindicales y vecinos, a los y las trabajadoras del Hospital Muñiz, al rechazo del Complejo Hospitalario Sur, proyecto impulsado por el Ministerio de Salud de la ciudad, que pretende unificar en un mismo edificio varios hospitales públicos.
“¡No al 5×1!”, gritaban una y otra vez cientos de compañeros y compañeras del Hospital Muñiz ayer a la mañana, bajo la lluvia, cuando se unieron apretados con sus paraguas en un abrazo simbólico en rechazo del proyecto Complejo Hospitalario Sur. Tal proyecto tiene como objetivo alojar otros cuatro hospitales tales como el Hospital Gastroenterología «Dr. Bonorino Udaondo», el Instituto de Rehabilitación Psicofísica (IREP), el Hospital M. Ferrer y el Hospital Oncológico «María Curie», es decir, cerrar estos y reducirlos a una sala más, dentro del edificio hospitalario.La obra comenzaría a licitarse en 2019, en caso de que se apruebe en la Legislatura, con una fecha estipulada de finalización en 2021.
Eduardo Berticco, doctor del hospital, dijo: “los trabajadores realizan una gran tarea comunitaria e hicieron frente a las grandes crisis que azotaron a la ciudad a nivel salud como la gripe – en el 2009 se atendieron en 2 meses 2000 consultas – o la epidemia de dengue en la que asistimos 5000 pacientes”
También sostuvo el doctor que: “en lo que va del año se realizaron más de 1000 controles de ataques de tuberculosis, y se vacunaron más de 4000 viajeros contra la fiebre amarilla. Y esto no son sólo números, ya que los viajeros pertenecen a clase media, la misma que chapea con el carnet de prepaga en nuestros consultorios, aún cuando esa prepaga no lo vacune contra esa enfermedad. Así mismo, en 2017 se realizaron más de 200.000 consultas ambulatorias, se internaron en pediatría más de 400 y consultaron más de 8000 niños y adolescentes. Además hay 200 pacientes pediátricos en seguimiento por HIV. Y todo esto lo hacemos nosotros. Por eso yo abrazo al Muñiz, y me opongo al cierre de 5 hospitales en la Ciudad” finalizó Berticco.
Margarita Canteros, enfermera del Hospital Muñiz, exclamó: “Nosotros tratamos la enfermedad que nadie quiere hacerlo. Este hospital se formó de manera aislada en zona sur, por la fiebre amarilla, cuando la gente se moría en cantidad y nadie se quería contagiar, nosotros lo hicimos. No sólo en el cuidado de enfermería, también en la contención, porque los enfermos de este hospital se sentían y se sienten discriminados. Nosotros peleamos por la salud pública. Los enfermeros escuchamos el alma de los pacientes y la familia.”
El Hospital Muñiz está especializado en las enfermedades infecciosas y está considerado como uno de los más importantes de Latinoamérica y es referente en temas de las luchas contra las enfermedades sexuales y la lepra.