Al igual que todos los años, la Central porteña adhiere y convoca a participar este sábado 24 de marzo de la Movilización, al cumplirse 42 años de la última dictadura cívico-militar. La concentración será a las 15 horas en la esquina de Salta y Avenida de Mayo, para marchar desde ahí, hasta la Plaza de Mayo por Memoria, Verdad y Justicia; para reafirmar que son 30 mil, y contra la impunidad, el ajuste y la represión de Macri y sus cómplices.
Para hablar sobre lo importante que es recordar esta fecha, desde la Secretaría de Comunicación de la CTAA Capital se comunicaron con Margarita Noia, secretaria de Derechos Humanos de la Central porteña.
– ¿Por qué es importante participar de la marcha este sábado?
El 24 de marzo es un día muy importante porque se marca que Nunca Más queremos que haya un Golpe en nuestro país. La gente de mi edad fue testigo de como todos los gobiernos constitucionales terminaban en golpes. Por suerte ya llevamos muchos años de democracia, mal o bien, con el Gobierno que sea, aunque nos equivoquemos, siempre tenemos que elegir nosotros quién nos gobierna.
Participar de la marcha el sábado es muy importante porque este Gobierno está llevando adelante políticas con las que están tratando de hacernos retroceder en muchos logros que hemos obtenido. Intentaron imponer el 2×1, pero gracias a la movilización se logró que no pudieran llevarlo adelante. Y ahora, hablaron de una lista para que tuvieran prisión domiciliria presos sociales, pero era una lista muy grande en la que había genocidas, torturadores y violadores. Entonces, hay que hacer como con Etchecolatz, que con movilización se logró que volviera a la cárcel. Y bueno, el 24 de marzo hay que decirle ‘No a la prisión domiciliria’, reafirmar que son 30 mil compañeros desaparecidos, ‘basta a las políticas de hambre’, y que queremos presupuesto para Educación y para salud, porque son los derechos que tenemos todos los ciudadanos.
Vamos a llevar muchas consignas, entre ellas que no se persiga más a los compañeros que salimos a reclamar a la calle, los trabajadores tenemos derecho a reclamar, más con la cantidad de despidos que ha habido últimamente. Pedimos también Justicia por Santiago Maldonado, porque nosotros realmente no creemos que se ahogó por casualidad, creemos que sí tuvo que ver la Gendarmería en eso. Reclamamos por la muerte de Rafael Nahuel, que sigue sin investigarse y lo mataron por las espalda. O sea, son tantos los casos, que no queremos que esta política se profundice, queremos que se pare a tiempo.
– Con todos estos casos de Gatillo Fácil, ¿A qué distancia quedamos de aquel reclamo de Nunca Más?
Realmente nos está llevando muy para atrás, por eso hay que pararlos ya. Si nos vamos a la década del 70, mucho antes del Golpe ya había comenzado la represión y los desaparecidos. Entonces, es importante ponerle un coto mucho antes de que avancen ese tipo de cosas. No les podemos dejar las manos libres para que maten impunemente. A nadie le gusta que haya inseguridad, pero de ahí a permitir que se mate, no. Para condenar está la Justicia, tratemos que la Justicia funcione como corresponde, pero todo dentro de la legalidad, y la legalidad no es el Gatillo Fácil. Nosotros no podemos permitir que se avance en métodos represivos.
– En todo este contexto, ¿Qué significa para vos que se abra una Casa Cultural con el nombre de Pepe Noia?
Para mi fue muy emocionante cuando los compañeros me llamaron y me dijeron, primero porque amo a las Madres de Plaza de Mayo Linea Fundadora, pero especialmente porque Pepa es mi mamá y me provoca mucha emoción. Ella falleció hace ya dos años y sin embargo yo todavía la sigo extrañando, éramos muy unidas.
Sus dos amigas, Elia Espen y Mirta Baravalle, viajaron un montón de horas desde Provincia para estar en la inauguración de la Casa Cultural y se quedaron como hasta las 12 de la noche. Realmente son admirables y demuestran el cariño que siguen teniendo -como dice Mirta- por la Pepita.
En la inauguración, Elia Espen dijo ‘cuando pase alguien por acá y vea Centro Cultural Pepa Noia se va a preguntar quién es y tal vez lo busca en internet y así va a conocer la historia de las Madres’.
Me pareció fantástico lo que dijo Elia, porque realmente es importantísimo tener presente la historia de las Madres, porque ellas son parte de nuestra historia, porque en el momento más oscuro y difícil de nuestro país estuvieron ahí, en la calle, en la lucha, nos abrieron el camino. Y los que ya por los ’80 empezamos a marchar al lado de ellas, sentimos que fueron las que nos abrieron los ojos.
Lamentablemente mi hermana había desaparecido en octubre del 76, y en el 77 mi mamá fue una de las 14 del primer grupo de Madres. Y así, sucesivamente todos los meses crecía. Por un lado era muy bueno porque se estaban organizando y por el otro era muy triste porque sabíamos que cada vez habían más desaparecidos, cosa que no terminábamos de entender en ese momento.
A mi las Madres de Plaza de Mayo -Línea Fundadora me enseñaron la importancia de la organización, o sea que para poder llevar adelante algo tenés que estar organizado y movilizado. Como dijo Azucena Villaflor, ‘vayamos a la Plaza a reclamar’. Eso me hizo entender que había que participar más y fui creciendo en participación, no solo en acompañar a las Madres, sino en organizarme gremialmente y partidariamente. Y bueno, mi mamá es parte de todo eso.