Debido a los cambios económicos que ha sufrido nuestro país en los últimos años y con la necesidad de indagar un poco más en qué es la inflación y en cómo impacta en nuestros salarios, desde La otra mirada Sur (LOMS) se entrevistó a Tomás Raffo, economista de la CTA.
– ¿Qué es concretamente la inflación?
La inflación es un proceso por medio del cual los agentes que tienen poder de mercado que en todo caso son los que se ocupan de las ventajas naturales de lo que hace a la economía, persiguen el objetivo de acrecentar su participación en la productividad y así se da un fenómeno por medio del cual la puja distributiva entre la inversión y el trabajador se expresa a favor de los empresarios y no de los trabajadores.
– ¿Cómo se detiene la inflación?
Si el diagnóstico es el que asumimos, lo que hay que hacer es regular el capital concentrado, regular las pautas de protección del excedente del empresariado más relevante y supone una regulación publica mucho más frontal. También supone discutir como se genera la producción de riqueza en cada sector de productividad, en función de eso de qué manera se puede transmitir un proceso de producción de riqueza que mejore la calidad de vida del sector y del común de la sociedad. Asimismo, se asegure que las empresas tengan ganancias pero normales y no elevadas como sucede en el caso de Argentina, en donde la inflación viene a ser el soporte por medio del cual incrementan las ganancias.
– ¿Por qué cree que los gobiernos no asumen la real inflación?
Porque asumir la real inflación supone asumir la complejidad del momento y eso requiere una discusión a fondo del modelo económico y de los capitales concentrados. Este gobierno no da la discusión. Hacen de cuenta como que estamos viviendo en el mismo modelo del 2007 cuando en realidad efectivamente hubo una mayor producción de riquezas, una mejora en salario y había una inflación muy baja. Eso era por efecto de que en realidad la economía argentina tenía una crisis muy profunda. Esto determinó que las principales empresas tenían la capacidad económica para poder realizar procesos productivos sin tener que invertir. Cuando esa capacidad se agota por que el crecimiento se agota, lo que se requiere para mantener el mismo sendero de crecimiento es una inversión más elevada de capitales, por eso es que en realidad se transforman en el agotamiento del crecimiento económico y en un proceso inflacionario que le permite seguir manteniendo las ganancias elevadas.
-¿Entonces?
Por eso que si el gobierno quiere nuevamente discutir la inflación, tiene que discutir qué tipos de capitales están presentes en la economía argentina, cómo realizan ganancias y cómo distribuyen esas ganancias en los distintos sectores. Lo que esa discusión va a dar como resultado es que efectivamente hay que replantear su conducta y esto supone una confrontación muy fuerte y en serio con los dueños del poder.
– ¿Cómo afecta la inflación directamente el bolsillo de los trabajadores?
Reduce la capacidad de compra del salario. Cada punto de inflación supone un punto menos de capacidad de compra de lo que en todo caso cada trabajador recibe como forma de pago por su puesto laboral. Es decir, el salario se reduce a medida que la inflación se incrementa y efectivamente lo que tenemos del 2007 hasta la fecha es un proceso donde las paritarias para los sectores asalariados registrados, logran recuperar una buena parte de lo que la inflación le está comiendo. Y cuando no recupera esa buena parte, lo que termina sucediendo es que la exigencia nuevamente hecha a la carrera por medio de la cual los trabajadores compran menos y consecuentemente cada vez esperan con más ansiedad las próximas paritarias.
Fuente: www.laotramiradasur.com.ar