Será en unidad de acción con la CTA de los Trabajadores que encabeza Hugo Yasky y los movimientos sociales Barrios de Pie, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC) quienes, al igual que la CTA Autónoma, rechazaron la intención del Gobierno de limitar la recomposición salarial en las próximas paritarias.
La pretensión del gobierno nacional de usar el bono de fin de año para hacer una suerte de borrón y cuenta nueva con los salarios –clausurándole a los sindicatos la posibilidad de que en las próximas negociaciones paritarias recompongan los sueldos, incluyendo en la discusión los puntos perdidos este año por la inflación–, generó esta respuesta en reclamo de medidas de fondo ante el crecimiento de la desocupación y la pobreza.
En este sentido, el secretario general de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, denunció un “pacto” entre el gobierno y la CGT y se refirió al bono anunciado esta semana por el gobierno: “El bono no es la forma de recuperar el poder adquisitivo. Ahora exigimos reapertura de paritarias, aumento de emergencia para los jubilados y un compromiso para que cesen los despidos tanto en el sector público como en el privado”. En este marco, el líder sindical confirmó el llamado a una “Jornada Nacional de Lucha con paros y movilizaciones en todo el país para el próximo 4 de noviembre”.
Al concluir, y ante la consulta de la prensa sobre por qué la CTA-A no fue convocada a la mesa de diálogo impulsada por el gobierno nacional, Micheli fue rotundo: “Al igual que el gobierno anterior, éste nos discrimina, no nos reconoce a pesar de tener Personería Jurídica. No puede ser que, como sabían de antemano que nos íbamos a oponer, nos dejaron afuera”.