La CTA porteña expresa su enérgica preocupación por los hechos ocurridos en la provincia de Jujuy que significaron la detención de la dirigente de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, y la represión al pueblo convocado en la Plaza Belgrano de San Salvador.
La Central Autónoma de Capital denuncia el atropello, repudia el accionar de las fuerzas del Estado y rechaza cualquier intento de someter a quienes son militantes del campo popular.
El argumento de “instigación a cometer delitos» no es más que un eufemismo para mostrar un rostro autoritario que no tiene otro significado que ser la cara de la criminalización de la protesta.
La CTA Capital se suma a lo expresado en el comunicado de la CTA Autónoma donde se expresa que “reiteradamente ha reclamado la derogación de la Ley Antiterrorista, el desmantelamiento del Proyecto X y la reforma de los códigos de faltas de las provincias que estigmatizan y persiguen a los pibes pobres. A más de treinta años de restauración democrática no se pueden aceptar estas herramientas que claramente buscan el disciplinamiento social en momentos donde se está llevando adelante un brutal ajuste económico que cae sobre las espaldas de los trabajadores y demás sectores populares y que, hasta el momento, ha dejado cerca de 30 mil trabajadores estatales y del ámbito privado en la calle, y la pulverización de los ingresos debido a la devaluación y escandalosa remarcación de precios.”
Desde la Central porteña se pide la inmediata liberación de Milagro Sala, el cese de la persecución a militantes y luchadores y que se abran instancias de diálogo para encontrar soluciones a las demandas sociales.
La mejor respuesta a estos atropellos a la libre participación y la democracia es la unidad de quienes luchan no sólo para defenderse sino para sembrar las bases de un país justo, soberano e igualitario.