Pasadas las 16.00, militantes sociales, políticos, de derechos humanos de la CTA y de la Multisectorial se concentraron en el Obelisco para marchar a Tribunales y volver a exigir la derogación de la Ley Antiterrorista y el cese de la criminalización de la protesta social. La jornada se sintió de Ushuaia a La Quiaca. Estuvieron presentes Norita Cortiñas y Adolfo Pérez Esquivel.
Del brazo de Pablo Micheli, Norita Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, acompañó la marcha y dijo: “Esperamos que en la lucha podamos conseguir una vida más digna para los 40 millones de habitantes en la Argentina. La Ley Antiterrorista es para perseguir a los luchadores populares, por eso vamos a estar en la calle cada vez que se quiere procesar a un luchador o un trabajador”. En relación al cambio de Gobierno del próximo 10 de diciembre, Nora opinó: “Hay muchos miedos con este gobierno que asume, pero yo no lo tengo, porque si salimos a luchar contra una dictadura cívico militar hasta vencerla, y ahora están siendo enjuiciados los genocidas, significa que la lucha y la resistencia va mejorando la vida de los pueblos”.
El premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel también marchó junto a la Central: “Estamos defendiendo el derecho del pueblo a su participación social, cultural y política. No puede ser que se judicialice la protesta social. Así se está violando la Constitución Nacional y el derecho del pueblo. Esto requiere de mucha unidad y resistencia para construir una patria más justa para todos”, afirmó Pérez Esquivel.
Al llegar a Tribunales, en pleno centro porteño, Juan Carlos “Pipón” Giuliani, secretario de Relaciones Institucionales de la Central, comenzó a saludar a las organizaciones presentes: la Federación Nacional Campesina, los Pueblos Originarios en Lucha, la CCC, el MST Teresa Vive, la FUA, la CONADU Histórica, ATE Capital Germán Abdala, los trabajadores portuarios, la FeTERA, la UST, SUTEBA Quilmes, el MOI, la CTA Capital y Buenos Aires, ATE, dirigentes de SUTEF, AAPM, Federación Nacional Docente, MTL, entre otras.
Además subrayó que en todo el país hubo movilizaciones en contra de la aplicación de la ley antiterrorista y la persecución a los luchadores. “Estamos solidarizándonos también con los trabajadores de Paraná Metal. Estamos frente al Palacio de Justicia, una justicia implacable con el pueblo pero obediente con el poder. Hay que dar testimonio de que no dejamos la calle”, dijo Giuliani.
El primero en tomar la palabra fue Arturo Pozalli, presidente de la FUA quien manifestó la solidaridad del movimiento estudiantil con los trabajadores de Tierra del Fuego “que enfrentan la Ley Antiterrorista en carne propia”.
De la Confederación de trabajadores de la Economía Popular (CETP), su representante, Jacquelina Flores del Movimiento Trabajadores Excluidos (MTE) dijo: “Queríamos venir a dar nuestro apoyo y decir que jamás, jamás, jamás abandonamos la lucha”.
En representación de la CCC, Amancay «Chiquito» Ardura sumó su voz: “A 10 días del cambio de gobierno, estamos en la calle otra vez para repudiar el juicio infame contra los docentes y camioneros de Tierra del Fuego”.
Guillermo Pacagnini de la Corriente Sindical del MST y de la CTA Nacional agregó: “Saludamos la justeza de haber realizado esta jornada de lucha. Salimos a la calle para marcarle la cancha al gobierno que viene y decirle que si va a profundizar el ajuste vamos a estar en las calles de todo el país”.
Llegado desde Uruguay, Leo Batalla, del PIT-CNT y del ESNA añadió: “No existe la democracia si se encierra a los luchadores sociales y si no nos dejan manifestarnos en la calle. La democracia se basa en la libertad. No a las leyes antiterroristas en América Latina, viva la clase trabajadora de todo el continente”.
El acto fue cerrado por Hugo Blasco, Secretario de Derechos Humanos de la CTA y Secretario General de la Federación Judicial Argentina: “La justicia es uno de los brazos represivos del sistema contra el pueblo. El dato objetivo es que en estos dos años se ha profundizado la criminalización de la protesta social: hay más de 5 mil compañeros y compañeras judicializados”. Blasco terminó sus palabras parafraseando a José Martí: “Los derechos no se reclaman, se conquistan”. Y en ese sentido volvió a llamar a luchar por el 82% móvil, paritarias libres y sin techo, salario mínimo, vital y móvil, planes sociales y jubilaciones igual a la canasta básica, el cese de la precarización laboral y un bono de fin de año de 5 mil pesos para todos los trabajadores y trabajadoras.